Las condiciones laborales y de generación de empleo que caracterizan al mercado mexicano, hacen del país una de las naciones con mayor interés de emprendimiento alrededor del mundo. El nacimiento de pequeñas y medianas empresas es constante.

Hast 2017, estimaciones de la Organizaciones para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) ubicaba a los mexicanos jóvenes como la quinta población con mayor desempleo a nivel mundial, tendencia que se mantendrá durante el año que acaba de comenzar.

Es por eso que, entre la población mexicana -sobre todo entre los más jóvenes- el emprendimiento representa una salida a dicha situación que tiene impactos importantes en la calidad de vida.

De acuerdo con el Reporte Global de Emprendedores Amway 2016, México se encuentra entre los países con mayor potencial de emprendimiento a nivel mundial. De hecho, el 92 por ciento de la población del país tiene una actitud positiva hacia el emprendimiento, mientras que el 73 por ciento  son emprendedores potenciales que se imagina iniciando su propio negocio, cifra que se encuentra muy por encima de la media global que se ubica sólo en 43 por ciento.

Aún cuando las intenciones y perspectivas alrededor del emprendimiento son altas, lo cierto es que pocos son los negocios y empresas de reciente nacimiento que logran desarrollarse con éxito.

En México el 75 por ciento de las startups cierran operaciones luego del segundo año de existencia, lo que implica que apenas el 25 por ciento de ellas se mantiene, de acuerdo con un nuevo reporte realizado por el Instituto del Fracaso.

La falta de planeación estratégica es parte importante de este problema en donde aspectos tan fundamentales como acciones de branding bien estructuras y desarrollo de esfuerzos de branding son causas principales.

En este sentido, compartimos tres recomendaciones para optimizar los esfuerzos de branding de pequeñas y medianas empresas:

Crea una identidad corporativa de adentro hacia afuera

Al iniciar un negocio y construir la marca que lo representará en el mercado, un asunto vital es contratar al talento adecuado. Esto no sólo tiene que ver con que los colaboradores posean los conocimientos y habilidades necesarios para llevar a cabo que las demandas de la empresa exigen, sino también contar con plantillas de empleados que compartan la ideología y los valores de la compañía. La construcción de marca comienza desde el interior; los empleados serán los mejores embajadores de marca.

Investiga para diferenciarte

En tiempos en lo que tedio parece estar dicho y hecho alcanzar niveles de diferenciación óptimos es una tarea compleja. Observar a detalle lo hecho por la competencia -tanto directa como indirecta- es vital para encontrar áreas de oportunidad que leídas como nuevas oportunidades para el negocio propio pueden se un activo que represente y comunique el mayor valor agregado de la marca.

Sé coherente

La imagen corporativa que se construye debe estar alineada a los valores que como empresa se proyectan. Es necesario cuidar detalles tan simples como el qué, cómo y cuándo se transmiten los mensajes que darán voz a la empresa. Un error en la materia pueden derivar en la pérdida de oportunidades de negocio.