Son muchas marcas las que en medio de la pandemia se han sumado con donaciones de material necesario para que los equipos médicos cubran su labor de la manera adecuada. Ahora es Bonafont la última marca en sumarse a esta tendencia.
De esta manera, tal y como apuntan desde El Economista, la marca de agua purificada donará media tonelada de plástico reciclado para la fabricación de 10 mil mascarillas médicas que serán entregadas al personal de los hospitales públicos de Jalisco.
En entrevista para el citado medio, Sofía Díaz Rivera, gerente de Sustentabilidad de Grupo Danone -propietaria de Bonafont-, indicó que la compañía está trabajando esta iniciativa de la mano del Miguel Huerta, académico del ITESO (Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente), quien desarrolló unas máscaras protectoras hechas de Pet.
Este programa se suma a lo ya hecho por otras firmas nacionales e internacionales. Por ejemplo, a nivel internacional, firmas como Amazon, Apple o Huawei han donado millones de insumos médicos para las instituciones de salud ubicadas, principalmente, en Asia, Europa y Estados Unidos.
En el país, destacaron acciones como las implementadas por Grupo Modelo y Bacardí, firmas que destinaron parte de su producción de alcohol para la fabricación y donación de gel antibacterial.
¿Qué tiene que ver el sabor?
A la par de este anuncio, Bonafont se convirtió en tendencia dentro de redes sociales, y aunque en primera instancia pudiera pensarse que la razón de aparecer en esta posición se debe a su donación, la realidad es que lo que está detrás es una encuesta llevada a cabo por los propios usuarios en donde se trata de determinar qué marca de agua purificada es la que tiene mejor sabor.
La discusión se derivó luego de que un usuario identificado como Tuitero Regio (@TuiteroRegio) indicará en una publicación que las aguas embotelladas tienen un sabor diferente, hecho que bastó para que sus más de 55.4 mil seguidores comenzaran a hacer juicios sobre esta posibilidad indicando que existen marcas que sabe mejor que otras.
La unica que me gusta es la Bonafont; las demás son super pesadas y me causan malestar. (Por el proceso de purificación!!!) https://t.co/iszVE7hV6b
— Tóxic como la Britni (@marcevodka) April 8, 2020
Kp2, yo prefiero mil veces la Bonafont que cualquier otra agua y entro a Twitter a ver el TT de bonafont y me doy cuenta que soy la única que prefiere esa agua. ?
— Aurora? (@aurorabigail) April 8, 2020
e.pura es la mejor amigos y bonafont que asco!! https://t.co/q2QmOAG1jM
— Laura Alvarado (@LauraJalv) April 8, 2020
Destacar en medio de la paradoja del consumidor
El fenómeno experimentado por Bonafont pone en evidencia un tema que las marcas con mayor atención de ahora en adelante deberán de considerar en el diseño de sus estrategias de comunicación.
Marcas y consumidores se relacionan en un mundo cada vez más conectado. Hasta el cierre de 2015, un estudio firmado por Juniper Research indicaba que existían 13 mil 400 millones de dispositivos conectados a la red. En los siguientes tres años, la cifra podría experimentar un crecimiento exponencial del 283 por ciento para llegar a más de 38 millones de dispositivos capaces de conectarse a internet.
La facilidad con la que el consumidor puede interactuar con el mundo online crece de manera exponencial; no obstante, a pesar de las oportunidades que el escenario plantea, nunca fue tan difícil para las marcas establecer conexiones reales con las audiencias o consumidores de interés.
Siempre conectados nunca accesibles
A decir de una investigación firmada por TNS, el 62 por ciento de los usuarios mexicanos afirman que su relación con el mundo online -dentro de la cual los medios sociales son protagonistas- es espontánea y se configura de momentos cortos que se repiten varias veces al día. Esto gana relevancia si se considera que, como apuntan desde Google, un adulto promedio tiene 16 mil micromomentos al mes con su teléfono celular, al mismo tiempo que un usuario promedio dedica 195 minutos de su tiempo de conexión semanal a WhatsApp.
A lo anterior se suma que los consumidores deciden si algo vale su atención o es digno de confianza y de atención en cuestión de 33 milisegundos promedio, de acuerdo con Neurosciencemarketing.
En medio de un momento de confinamiento, estas cifras cobran mayor relevancia y todo indica que el consumidor pasa más tiempo navegando en la red, pero a diferencia de lo que podría pensarse, la disposición para atender asuntos relacionados con marcas podría ser menor, más cuando la comunicación no logra captar su atención en cuestión de instantes.
Esto responde a las proyecciones sobre los hábitos de las propias audiencias, en donde Socialbakers estima que en medio de la pandemia los usuarios de redes sociales registrarán una menor interacción con los post de marcas conforme las semanas avancen. El reto para las marcas sin duda no es menor.