- Activistas anti-Trump boicotean a Tesla por los recortes de Musk en el gobierno.
- Buscan dañar la imagen de Tesla y afectar económicamente a Musk.
- Las redes sociales se usan para promover el boicot con hashtags como #teslatakedown.
Activistas anti-Trump están apuntando a Tesla y otras marcas de Elon Musk en señal de protesta por los recortes en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) orquestados por el magnte a petición del presidente estadounidense Donald Trump.
El boicot busca dañar la imagen de Tesla y afectar el bolsillo de Musk, CEO de la compañía.
Tesla en la mira
La campaña “Tesla Takedown” insta a la gente a vender sus Teslas, deshacerse de acciones de la empresa y unirse a las protestas en los concesionarios.
Carolanne Fry, una empleada pública y demócrata registrada, lideró una manifestación de 350 personas frente a un concesionario de Tesla en Portland, Oregón, como parte de este movimiento, publica Reuters este jueves 6 de marzo.
Fry y otros organizadores buscan que el sistema de jubilación de su estado se deshaga de sus acciones de Tesla, buscando presionar a Musk desde todos los ángulos económicos posibles.
La popularidad de los vehículos eléctricos de Tesla entre los estadounidenses de mentalidad liberal se ha visto empañada por la asociación de la marca con las políticas de Trump.
Para algunos, Tesla se ha transformado en un símbolo de la agresiva remodelación de la política nacional y exterior de Estados Unidos, lo que la convierte en un objetivo natural del movimiento de protesta.
Impacto en la imagen de marca
El boicot incluye una campaña en redes sociales como Instagram y X con hashtags como #teslatakedown y #swasticars.
Este último hace referencia a un gesto de mano realizado por Musk que fue criticado por su similitud con el saludo nazi.
A pesar de que Musk ha desestimado estas críticas, necesariamente la controversia contribuye a empañar la imagen de sus marcas.
Algunos dueños de Tesla padecen el enojo de desconocidos anti-Musk. Rainer Eckert, por ejemplo, un ingeniero forense de 69 años en Wallingford, Washington, que votó por la demócrata Kamala Harris, planea vender su Tesla y donar las ganancias a la caridad, dice la agencia de noticias.
Mientras tanto, pegó una leyenda en el carro que dice “Lo compré antes de que supiéramos que era un idiota”, aunque esto impidió que un extraño pegue un letrero de “coche nazi”.
¿Afecta esto a las ventas de Tesla?
Aunque es difícil determinar con exactitud cómo las actividades políticas de Musk están influyendo en las ventas de Tesla, estas disminuyeron el año pasado por primera vez. Te lo contamos en Merca2.0.
Los analistas señalan otros factores en el mercado global de vehículos eléctricos, como el aumento de la competencia de marcas chinas y fabricantes de automóviles tradicionales como General Motors.
Sin embargo, algunas encuestas sugieren que la participación de Musk en la política está alejando a posibles clientes.
Un sondeo realizado después de las elecciones de noviembre mostró que un porcentaje mucho mayor de votantes que apoyaron a Kamala Harris tenían una opinión desfavorable de Tesla en comparación con los que apoyaron a Trump.
Entre los votantes de Harris, el 59% dijo tener una opinión desfavorable de Tesla, en comparación con el 36% de los votantes de Trump encuestados.
Las marcas, los famosos y la reputación
La conexión entre figuras públicas y sus marcas es cada vez más evidente en el mundo del marketing. La reputación y las acciones de un líder empresarial pueden tener un impacto directo en la percepción de la marca y, en última instancia, en su éxito comercial.
En el caso de Elon Musk, sus controvertidas posturas políticas y su estilo de liderazgo han generado un debate polarizado que se extiende a sus empresas, como Tesla, SpaceX y X.
Para los profesionales del marketing y la publicidad, es esencial comprender cómo estas dinámicas pueden influir en las estrategias de branding y comunicación.
Es importante considerar el impacto de la imagen pública de los líderes empresariales en la percepción de la marca y adaptar las campañas publicitarias en consecuencia.
Además, es clave monitorear de cerca las conversaciones en línea y las redes sociales para identificar posibles crisis de reputación y responder de manera oportuna y efectiva.
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