Después de que más de 250 marcas retiraran su publicidad de Youtube, acusando que sus banners salían junto a videos extremistas, Google aceptó su culpa, sin embargo, hasta el momento, su CEO, Larry Page, no ha emitido declaraciones, y la compañía no ha explicado cómo va a solucionar el problema de algoritmo.
Diariamente, marcas retiran sus anuncios de Google. Toyota, Starbucks, Volkswagen, AT&T, Mercedes Benz, Johnson & Johnson, entre los más importantes, quienes refirieron que no regresarían hasta que Google presentara un nuevo algoritmo, o bien, que Youtube les hiciera un descuento para volver a anunciarse.
De acuerdo con Nomura Instinet, una firma de inversión en Wall Street, el boicot de marcas contra Youtube podría costarle a Google más de 750 millones de dólares, cifra que podría aumentar si Google no ofrece soluciones al problema de algoritmo que tiene, sin embargo, la controversia continúa porque las calificadoras y firmas de Wall Street comenzarían a rebajar las estimaciones de crecimiento y el precio de las acciones de Google.
Según The Financial Times, Group M, uno de los mayores compradores de medios, perteneciente al grupo WPP, trabaja junto a Google en las medidas a tomar respecto al escándalo del boicot, y entre las soluciones que se están manejando, destaca una reducción de precio a usuarios premium, así como acciones que eviten que los anunciantes aparezcan junto a videos de contenido extremista.
Para los analistas de Wall Street, Google ya se tardó en dar respuestas, por lo que el boicot generará pérdidas millonarias a la compañía de Larry Page, por lo que los ingresos anuales de Youtube, que son de 10.2 mil millones de dólares, podrían disminuir más de 7.5 por ciento este 2017.
La controversia surgió cuando el rotativo inglés, The Times, investigó y publicó que marcas como Land Rover y Mercedes Benz se anunciaban junto a videos extremistas del Estados Islámico (ISIS), y semanas después Google fue convocado por el parlamento británico para dar respuestas.
El escándalo de Google se da en un contexto donde los anunciantes comienzan una temporada de contratación de publicidad en medios, denominada “upfronts”, donde la televisión buscaba ganar esos espacios, sin embargo, Youtube podría salir derrotada en esta ocasión.
En una investigación, RBC Capital Markets, apuntó que que las ganancias de Google se verán afectadas un 10 por ciento por el boicot de anunciantes, sin embargo, los daños no serán mayores para la compañía porque su valor de marca “es más grande”.