De acuerdo con un reporte del Financial Times, los inversores inmobiliarios parecen ser un buen ejemplo de la definición de un cínico de Oscar Wilde: un hombre que conoce el precio de todo y el valor de nada.
Según el medio financiero, el sector de bienes raíces está obsesionado con las valoraciones teóricas: los desarrolladores, los banqueros, los agentes inmobiliarias, las aseguradoras y los comunes compradores de viviendas. Pero, como cualquier propietario desesperado por completar una venta, la única medida real de valor de una propiedad es el precio que alguien pagará por ella.
En tanto, los pioneros de los grandes datos prometen revolucionar el negocio de valoración de propiedades, impulsándolo del área del arte hacia el campo de las ciencias. Al proporcionar valoraciones más rápidas y precisas derivadas de una gran cantidad de conjuntos de datos, afirman que pueden ofrecer valoraciones más confiables para todos. Un mercado mejor informado debería ser un mercado más racional y eficiente.
Según el informe, algunas empresas de tasación, como Hometrack en el Reino Unido, han proporcionado a los bancos evaluaciones automáticas casi instantáneas para propiedades residenciales durante años. Esto ha permitido a los bancos recortar costos y mejorar el servicio al cliente al ofrecer decisiones hipotecarias más rápidas.
Por su parte GeoPhy, una startup holandesa, tiene la ambición de proporcionar valoraciones casi en tiempo real de todas las propiedades comerciales y residenciales en todo el planeta. “Nuestro objetivo es proporcionar un flujo continuo de información”, detalló Teun van den Dries, fundador de la herramienta.
GeoPhy comenzó al valorar 8.6 millones de propiedades en los Países Bajos, se basó en los datos del Registro de la Propiedad, incluyó todas las transacciones registradas, y las combinó con varios cientos de otros conjuntos de datos relevantes.
La startup ha extendido su mapeo a 48.5 millones de propiedades en el Reino Unido y 147 millones de propiedades en 48 estados de la Unión Americana; el objetivo de la firma es convertirse en un servicio global, aunque puede verse obstaculizado por la falta de datos en algunos países, especialmente en China.
Los expertos inmobiliarios dicen que el valor de las valoraciones automatizadas sólo se demostrará a lo largo del ciclo económico. Algunas empresas de valoración admiten en privado que la metodología de la industria sigue siendo una tarea de curso, aunque está avanzando constantemente con el acceso a nuevos datos.
Las propiedades comerciales son inherentemente más complicados de valorar debido a la falta de transparencia sobre los términos del arrendamiento y los flujos de ingresos. La propia condición financiera del propietario y el acceso al capital también pueden ser factores determinantes del precio.
Las valoraciones de las propiedades siempre dependerán del juicio y del método científico. Las propiedades exclusivas, como las tiendas insignia en ubicaciones privilegiadas que solo cambian de manos cada 30 años, son particularmente difíciles de valorar por métodos automatizados porque hay una escasez de datos disponibles.