Por Alan Campos
Twitter: @giallor84
Correo: [email protected]
En tan sólo un par de años Barcelona logró establecerse como la segunda franquicia deportiva más valiosa del planeta por encima de otras de gran abolengo como Manchester United, Yankees de Nueva York o Cowboys de Dallas; y aunque la parte deportiva jugó un papel fundamental en el encumbramiento del cuadro catalán, el verdadero mérito consistió en democratizar la marca Barcelona, ejemplo que poco a poco ha comenzado a seguir su más grande rival, el Real Madrid.
Notas relacionadas:
¿Quién diablos es Michael Jordan?
Estados Unidos, el Waterloo de Adidas
En sus marcas, listos…fuera
Ante la inminente amenaza que el conjunto blaugrana representa dentro del listado realizado de forma anual por la revista Forbes (el cual tiene al Real Madrid a la cabeza con una valor de 3 mil 400 millones de dólares), el cuadro merengue ha comenzado a copiar la fórmula que tan buenos resultados ha dado a su rival en los últimos tiempos.
Es decir, hace tan sólo un par de meses el Real Madrid decidió extender su relación con Nivea a Latinoamérica, región en la cual el actual líder de la Liga BBVA ha apostado de manera importante a través de patrocinios regionales con marcas como Gillette, Big Cola o Tecate desde hace varios años y que sin embargo se había mantenido relegada para el madridismo.
Asimismo, este lunes el Real Madrid confirmó a la manufacturera de autos eléctricos china Luyuan como su primer sponsor en China, nación donde pese a haber realizado diversas giras amistosas en años recientes no contaba con ningún patrocinador oficial antes del día de hoy.
Otro claro ejemplo de esta apertura comercial que está experimentando el madridista con el firme objetivo de mantenerse como la franquicia deportiva más valiosa del planeta, es la apertura de su tienda oficial en pleno Zócalo de la ciudad de México (una empresa conjunta con Grupo Martí), siendo ésta la primera tienda oficial del Real Madrid fuera de territorio español.
No cabe duda que en una economía global donde las fronteras se encuentra tan diluidas, el mantenerse ajeno de los mercados que demandan tus productos es poco menos que un suicidio, lección que el Real Madrid parece haber aprendido observando el éxito de su gran rival.