La minería de criptomonedas, fundamentalmente la de bitcoin (por lejos, el activo digital más importante), se ha convertido en un tema de conversación desde que comenzó el auge del sector.
Es que con la creciente demanda de bitcoin y otras criptomonedas, el proceso de extraerlas se ha vuelto más popular (y rentable) y ha encendido el interés de los gobiernos.
La minería es el proceso de creación de nuevos bitcoin (en el caso de esa cripto) mediante la resolución de problemas matemáticos complejos con computadoras potentes. Los mineros usan su poder de cómputo para validar transacciones en la red blockchain, que es la tecnología subyacente a la mayoría de las criptomonedas.
Una vez que se valida un bloque de transacciones, se agrega un nuevo bloque a la blockchain y el minero que validó el bloque se ve recompensado.
La razón principal por la que los inversores se involucran en la minería es, justamente, para ganar recompensas en bitcoin. La minería puede ser una actividad muy lucrativa, especialmente cuando el valor de las cripto es alto.
¿Los problemas? Los críticos del sector dicen que requiere una cantidad muy alta de electricidad para alimentar los equipos informáticos utilizados en los procesos de minería.
De hecho, es una realidad que el consumo de electricidad de la minería de bitcoin es más alto que el consumo total de energía de algunos países pequeños o medianos.
Minería bitcoin bajo la lupa de Biden
La novedad del sector de este viernes 10 de marzo llega desde los Estados Unidos, donde se conoció que en el presupuesto 2024 presentado por la administración de Joe Biden, se incluye un impuesto especial para la minería cripto.
En efecto, de aprobarse y comenzar a tener vigencia, los mineros de criptomonedas de Estados Unidos podrían tener que hacer frente a un impuesto del 30 por ciento sobre el costo de electricidad, con la idea de “reducir la actividad minera” en ese país, dice el proyecto que debe superar el congreso.
Según se conoció, cualquier compañía que utilice recursos, bien sean propios o arrendados, estaría “sujeta a un impuesto especial equivalente al 30 por ciento del costo de la energía eléctrica usada en la minería de activos digitales”.
La norma también dice que estas firmas deberían declarar cuánta energía eléctrica consumen y si están conectadas o no a la red.
El impuesto se aplicaría de manera progresiva, a un ritmo del 10 por ciento por año hasta llegar al 30 por ciento.
El documento del Tesoro de los Estados Unidos habla de un “aumento del consumo de energía atribuible al crecimiento de la minería de activos digitales” y dice que podría “hacer subir los precios de la energía para aquellos que comparten una red eléctrica con los mineros”.
También dice que “crea incertidumbre y riesgos para los servicios públicos locales”.
En paralelo, Biden propone una norma (separada de la que involucra a los mineros) que impediría a los inversores en criptomonedas vender sus activos con pérdidas y recomprarlos inmediatamente. Espera recaudar 24 mil millones de dólares.
El precio de bitcoin, luego de estas noticias, cayó por debajo de los 19.800 dólares, desde los 21.500 que cotizaba 24 horas antes.
Ahora lee:
Cambios en la regulación golpean al precio de Bitcoin: esto sabemos
Bitcoin supera U$S 18 mil y los abogados de FTX recuperan miles de millones
¿El fin de Bitcoin? “No es un criptoinvierno, es una masacre”