En la actualidad, la Ciudad de México, como las grandes urbes del planeta padece constantemente el problema de la contaminación sumado al de la movilidad, por lo que varias marcas emprenden proyectos para ofrecer a los consumidores alternativas de transporte más funcionales y amigables con el medio ambiente.
Una de las alternativas que está tomando mucha fuerza en los últimos años, es la de las bicicletas eléctricas. Tan es así que para 2018 se proyecta que que las ventas mundiales de este tipo de vehículos será de aproximadamente 47,6 millones, de acuerdo con datos de Statista.
Una de las compañías que buscan explotar este mercado es GeoOrbital, que desarrolló una rueda eléctrica compatible con las bicicletas mecánicas. La idea de este proyecto surgido en Boston, Estados Unidos es que los consumidores no tengan la necesidad de invertir en una bicicleta nueva, sino que puedan convertir la que tienen en un vehículo autopropulsado.
Test-driving @GeoOrbital: Electric wheel that makes any bike an E-bike: https://t.co/QMtXriasFN pic.twitter.com/yT2uZREOtM @BostInno
— Paul Costello (@paulfcostello) 3 de mayo de 2016
Otro proyecto similar es el Copenhagen Wheel, dispositivo que también transforma la llanta de una bicicleta en un transporte eléctrico. La idea tiene su origen en un científico del Instituto Tecnológico de Massachusetts, y recibe su nombre a la capital de Noruega, debido a que el ayuntamiento aportó el financiamiento para su desarrollo.
I have ridden a bike powered by the Copenhagen Wheel, and I pronounce it cool. @CPHWheel pic.twitter.com/gGjIEED7Di
— Andrew McAfee (@amcafee) 16 de abril de 2016
Un caso peculiar es el de Wheezy, una rueda auxiliar conectada como un remolque a la bicicleta, que la convierte en un vehículo eléctrico.
Cabe destacar que tanto Wheezy como GeoOrbital son proyectos que buscan financiamiento a través de Kickstarter, con el objetivo de poder consolidarse.
No cabe duda que los medios de transporte eléctricos son una tendencia que gana terreno desde hace unos años, en gran medida por la crisis de hidrocarburos y que parte de la población empieza cambiar sus hábitos de consumo en busca de opciones más amigables con el medio ambiente, por lo que el desarrollo de las bicicletas eléctricas será un mercado continuará atrayendo a iniciativas particulares así como a grandes firmas.