El magnate Jeff Bezos, fundador de Amazon, se ofreció a cubrir costos de la Nasa por hasta 2 mil millones de dólares si es que ésta reconsidera un contrato para construir un módulo lunar con Blue Origin, su compañía aeroespacial.
Este (¿desesperado?) intento de Bezos tiene dos lecturas: por un lado, es una muestra más de la feroz batalla que ya se está produciendo con Elon Musk (Tesla y SpaceX) por el liderazgo en el segmento de negocio de los viajes al espacio.
Por otra parte, hay que pensar que los empleados de Amazon deberán hacer un esfuerzo más para sostener los negocios paralelos de Bezos.
Hay que recordar que la semana pasada, en la conferencia luego de regresar del vuelo a bordo del cohete de Blue Origin New Shepard, el magnate dijo, desacertadamente, que él había cumplido su sueño gracias a los trabajadores y los consumidores de Amazon.
Fue una expresión que no cayó nada bien hacia el interior de la compañía, donde vienen luchando por una mejora en los salarios luego del enorme incremento del trabajo producto de la pandemia de coronavirus.
El hombre más rico del mundo le envió una carta al administrador de la NASA, Bill Nelson, ofreciendo cubrir hasta 2 mil millones de dólares en costos para que, a cambio, la agencia considere contratar a Blue Origin para construir el vehículo que llevará a los próximos astronautas a la Luna.
Su propuesta, muy inusual, se produjo unas semanas después de que la NASA escogiera a SpaceX, de Musk, para un contrato de US$ 2,9 mil millones para construir el vehículo.
La agencia originalmente tenía la idea de que por lo menos dos empresas del sector privado compitieran para construir la aeronave que transportará a los astronautas a la Luna para las misiones de Artemis.
Pero en mayo, la agencia anunció que avanzaría sólo con SpaceX como el única compañía contratada. El argumento principal fue el tema de los costos.
Bezos criticó la decisión de la NASA y, ahora, luego del exitoso viaje del New Shepard, volvió a la carga ofreciendo pagar a cambio de obtener el contrato.
Según la carta pública de Bezos, Blue Origin cubrirá todo el déficit presupuestario de HLS durante dos años y hasta el monto de 2 mil millones. “No es un aplazamiento en los pagos, es “una renuncia total y permanente a esos pagos”, dice el magnate en el texto.
Es decir, se los regala.
Lo que hay que ver ahora es cuál será la reacción de Musk, quien no suele quedarse callado y disfruta de los intercambios en Twitter, su red social preferida.