Internacional.- Una de las industrias que más se ha beneficiado de los avances tecnológicos es la de los videojuegos, no sólo por la posibilidad de ampliar sus ganancias a través de contenidos descargables, sino por las cuotas de interacción en línea e incluso por la posibilidad de tantear el terreno a través de los demos y betas, que les darán una idea más clara de la recepción que tendrán sus próximos lanzamientos.

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Tan sólo en el caso de las versiones Beta, el juego Destiny de la compañía Activision registró 4 millones 638 mil 937 usuarios únicos, cifra récord para la nueva generación de consolas de videojuegos, desde el día de su lanzamiento (17 de julio), hasta la finalización de la prueba el pasado domingo 27.

Pero la puesta en marcha de las versiones Beta no únicamente sirve como termómetro para medir la posible recepción que los juegos en desarrollo tendrán, sino que también ayuda a los desarrolladores a mejorar el producto final gracias a la retroalimentación que existe a través de las redes sociales y las mismas plataformas de videojuegos.

No cabe duda que la tecnología sigue cerrando la brecha entre marcas y consumidores, situación que beneficia a ambos bandos y nos hace más fácil entender como es que la industria de los videojuegos alcanzará un valor de 111 mil millones de dólares a nivel mundial para 2015 de acuerdo con la consultora Gatner, Inc.