El CEO de Levi Strauss & Co, Chip Bergh, suele dar declaraciones que generan mucha conversación. Vale recordar su recomendación a los usuarios de la marca cuando les dijo que lo mejor era no lavar los jeans.
“Estos jeans tienen un año y aún no han pasado por una lavadora”, decía Bergh hablando de los pantalones que llevaba puestos en la conferencia Fortune Brainstorm Green de 2014 en California.
“Es mejor congelarlos, meterlos en el refrigerador. Es cierto que parece totalmente asqueroso”, decía Bergh Fortune, para luego aclarar que a la hora de limpiar las manchas hay que utilizar “una esponja o un cepillo de dientes y dejarlos secar al aire”. Respecto de meterlos en el congelador, aseguró que así “se mantienen como el primer día” y que “el frío elimina los olores”.
El recuerdo de esas declaraciones de Bergh sirven como contexto para sus recientes palabras respecto de la pandemia, la talla de las personas y sobre cómo el coronavirus alteró las preferencias, prioridades y valores de los consumidores.
“La cantidad de personas que han variado de peso es asombrosa”, dijo Bergh en una entrevista de AP.
Según el CEO de Levi’s, no sólo subieron de peso. “Algunas personas aumentaron de peso durante la pandemia, es cierto, pero muchas otras bajaron, tanto entre los hombres como entre las mujeres”, explicó, para luego dar números: “Más del 25% de los consumidores tienen ahora una nueva talla”.
Levi’s, Bergh y las nuevas tallas
Bergh no dijo en la entrevista si estaba hablando en especial de los consumidores de los Estados Unidos o si se refería a todos los mercados de Levi’s.
Hay que tener en cuenta que más de la mitad de las ventas de la marca se realizaron fuera de Estados Unidos en 2020.
Tanto en Estados Unidos como en la mayoría de los otros países la pandemia alteró la cotidianidad de las personas, limitando la vida diaria y obligando a cambiar muchas de las costumbres.
Mientras algunos salieron al aire libre para hacer más actividad física asustados por la enfermedad, otros se volvieron mucho más sedentarios y se dedicaron a comer y beber más de lo habitual.
Esto trajo como consecuencia que se produjeran grandes cambios de peso.
Un estudio en unas 300 personas citado por QZ encontró que los cambios en su estilo de vida hicieron que aumentaran un promedio de unos 650 gramos por mes en la pandemia.
En una encuesta sobre aproximadamente 3 mil adultos en los Estados Unidos hecha por la American Psychological Association, casi el 43 por ciento de los analizados dijo que habían subido de peso sin quererlo. La cantidad promedio de peso que subieron promedió los 13 kilos.
La encuesta también encontró que el 17 por ciento de los relevados dijo que bajaron de peso: una pérdida promedio de 11 kilos.
Aunque Bergh no vinculó los cambios de peso a las nuevas tendencias de la moda, lo cierto es que Levi’s ha comenzado a vender, como otras marcas, estilos de jeans de “pierna ancha”.