Lejos de querer imitarla, copiarla o temerle, a la competencia hay que analizarla. Observar, interpretar y medir a nuestros principales competidores nos da la posibilidad de conocer mejor el mercado en el que nos desarrollamos y hacerle frente a nuevas posibilidades, tendencias y estrategias.
El Benchmarking es una técnica mediante la cual se evalúan procesos, ideas, servicios o métodos, de referentes que pueden ser competidores o no, y tienen que ver con el área en que te desarrollas.
Esta técnica es muy efectiva para:
- Conocer nuevas tendencias en el mercado.
- Detectar áreas de oportunidad para implementar en nuestro negocio.
- Conocer lo que opina la comunidad o la audiencia.
- Detectar puntos de fuga o fallas en la propia estrategia.
- Fomenta la cultura del cambio y el dinamismo de una organización.
Estos beneficios puedes llevarlos a varios ámbitos del marketing digital: desde estrategias o funnels, hasta redes sociales, dependiendo de tu objetivo. Porque sí, es necesario hacerlo con criterio y con alguna meta establecida para que tenga algún sentido y nos ayude de alguna forma en nuestro negocio.
Elaborar Benchmarking es más que simplemente observar lo que hace algún competidor o referente, debe tener una razón de ser. Por eso, aquí te comparto los pasos que debes seguir para establecer una estrategia correcta de Benchmarking:
1. Planificación
En la primera etapa, se planifica la investigación. Si no sabes bien por dónde comenzar, puedes hacerlo respondiendo las siguientes preguntas:
- ¿Qué quiero medir?
- ¿Quiénes son mis principales competidores?
- ¿Cuál es el objetivo de mi evaluación?
- ¿Qué canales voy a investigar?
- ¿Qué datos son relevantes para mi investigación?
- ¿Cómo lo llevaré a cabo?
Es clave recopilar datos, obtener la mayor cantidad de información de diferentes fuentes que nos serán útiles: redes sociales, email marketing, anuncios, sitio web, asociaciones profesionales o investigaciones propias.
Tener claro esto, hará que la búsqueda y el análisis no sean una pérdida de tiempo si quieres realmente sacar provecho de esta información para tu negocio.
2. Análisis
Si ya tienes a mano toda la información necesaria, el siguiente paso es analizarla. Pero, ¿qué hacer luego de recopilar los datos? La respuesta certera estará dada por el paso anterior, es decir, por tus objetivos.
Supongamos que estás planeando lanzar un producto o servicio nuevo al mercado y decides elaborar Benchmarking para conocer qué estrategias llevan adelante tus competidores. La investigación y los datos estarán enfocados a conocer qué procedimiento y metodología de lanzamiento son tendencia o cuáles funcionan mejor.
A partir de ello podrás hacer ajustes a tu propia estrategia o bien asegurar que vas por el buen camino.
3. Puesta en marcha
Luego de analizar los datos más relevantes para tu negocio y tu objetivo, es momento de seleccionar aquellas tácticas que son útiles para tu estrategia, y las que debes descartar (o dejar para otro proyecto).
Los aspectos de referencia que puedas utilizar, debes adaptarlos a tu negocio, implementando mejoras y, por supuesto, con tu propia esencia, haciéndolo a consciencia, identificando si realmente ayuda a la consecución de los objetivos. No es cuestión de sumarse a tendencias solo por hacerlo.
4. Análisis de resultados
Si no mides ¿cómo puedes saber si funciona? En el último paso, te sugiero que analices si lo que has implementado funciona y si es factible para tu negocio. Incluso, si puedes hacer una prueba A/B (si fuera un anuncio o una landig page, por ejemplo), mucho mejor.
¡Recuerda que la medición de datos es la base de la toma de decisiones estratégica!