El marketing social se hace presente en el fenómeno de payasos siniestros que se desató alrededor del mundo y al menos en el poblado de Whitehaven, Gran Bretaña, le puso una solución al problema y se llama Batman.

El grupo de asistencia Los Superhéroes de Cumbria envió al “más apto” de sus integrantes para hacer frente a los ataques, que de acuerdo con los reportes locales “asustan mucho a los niños y no los dejan dormir”.

Los Superhéroes de Cumbria son un grupo de personas que visita hospitales y orfanatos vestidos de super héroes, con el objetivo de brindar felicidad y entretenimiento a los niños que se encuentran ahí. La función del Caballero de la Noche será escoltar niños y adultos por las calles para que no se sientan intimidados por los payasos.

Para los Héroes de Cumbria “los niños son su mayor prioridad”, por esa razón intimidarán a los payasos.

La agrupación se compone por Batman, Spiderman, Capitan América, un Stormtrooper y Kylo Ren. Aunque de vez en cuando se incorporan otros invitados.

De acuerdo con la Policía de Londres, entre el 7 y 9 de octubre se registraron 59 ataques de payasos en las calles, sólo en el poblado de Kent. Para las leyes británicas este tipo de acciones se procesan como asalto criminal, debido a que deja secuelas de miedo, desesperación y ansiedad a sus víctimas.

Por su parte, las autoridades del poblado de Northumbria, en Cumbria, ordenaron a las tiendas que no vendan trajes de payasos en los próximos días, para detener la oleada.

Aunque en un principio se pensó que el problema era parte de una campaña de prank marketing por el estreno de la película IT (Eso), la teoría fue descartada por los propios productores del rodaje.

Sin embargo, las marcas ya se están viendo afectadas por la popularidad de estos personajes, ya que empresas como McDonald’s tienen como imagen publicitaria a un payaso, mismo que por decisión de la empresa no estará presente en eventos hasta que se resuelva el problema.

En México, se presentaron varios reportes en los que la ciudadanía ha denunciado intimidación por personas que utilizan disfraces de payasos. Algunas comunidades de Facebook han llamado a la población a que unan esfuerzos para terminar con esa práctica.