La producción mundial de oro viene creciendo desde 2008. De las 2.280 toneladas métricas anuales extraídas en el año de la gran crisis financiera internacional, 2017 cerró con 3.150 (según datos de Statista). Esto representa un crecimiento del 38% en una década.
Por otra parte, el precio promedio anual del oro tuvo en 2016 y 2017 dos subas consecutivas para ubicarse en 1.250 dólares la onza, luego de tres años de baja (2013-2015). Según los analistas, éste será el piso de la década debido a la inestabilidad financiera creciente y a las disputas comerciales entre China y los Estados Unidos.
Es una regla básica de la economía mundial: cuando hay crisis, el refugio es el oro.
En ese marco de buenas perspectivas de precios a futuro hay que leer la novedad de este lunes: la canadiense Barrick Gold se combinará con la británica Randgold Resources en un acuerdo de US$ 18.000 millones de dólares que creará la mayor minera de oro del mundo.
La nueva empresa producirá más de 6,5 millones de onzas de oro al año, eclipsando a su competidor más cercano, Newmont, que cotiza en la bolsa de Estados Unidos. El grupo cotizará en Toronto y Nueva York.
Este lunes, las acciones de Randgold abrieron con una cotización de US$ 67,18 cada una, un 3,8 por ciento más que el viernes, cuando no se había confirmado el acuerdo.
Hombres de caracter fuerte
El acuerdo tiene una característica más: unirá a dos de las personalidades más importantes de la industria del oro: John Thornton, un ex banquero de Goldman Sachs que dirige la Barrick desde 2014; y Mark Bristow, el polémico ejecutivo sudafricano que fundó Randgold en 1995.
“Qué tan bien se lleven estos dos hombres en el trabajo diario determinará el éxito del acuerdo”, dice Financial Times. “Bristow será el director ejecutivo y se encargará de las operaciones, mientras que Thornton será el presidente ejecutivo, dirigiendo la estrategia”.
Las negociaciones llevaban más de tres años entre Barrick y Randgold, aunque se habían intensificado en los últimos nueve meses cuando los dos altos ejecutivos mantuvieron reuniones semanales.
Con la fusión, la compañía controlará algunas de las minas de oro más grandes y rentables del mundo, incluidas las operaciones Cortez y Goldstrike de Barrick en Nevada (Estados Unidos), la mina Kabli de Randgold, en la República Democrática del Congo, y la mina Loulo-Gounkoto, en Malí.
Los accionistas de Barrick poseerán el 67 por ciento de la nueva compañía, mientras que los de Randgold tendrán el 33 por ciento restante. El valor de mercado de la empresa combinada es de unos US$ 18.300 millones.