A pesar de que la mayoría de las actividades económicas han abierto en la Ciudad de México, desde hace poco más de un año, los bares, antros y centros nocturnos se mantienen cerrados, lo que ha supuesto un duro golpe para un sector que genera cientos de empleos.

Lo cierto es que en medio de un proceso de vacunación que avanza, ya se está contemplando la posible reapertura de estas actividades económicas, que aunque se les ha permitido abrir con ligeros cambios en sus giros, están padeciendo a niveles nunca antes visto.

Condiciones de reapertura 

Con esto en mente, y ante la presión del sector, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, indicó que se analiza un esquema en donde antros y bares podrían regresar a sus operaciones si los asistentes a estos lugares de entretenimiento nocturno presentan una prueba negativa a Covid-19 o bien, un comprobante de su esquema de vacunación completo.

“La idea es, sin excluir, pues buscar que en los lugares cerrados pues haya personas que ya hayan sido vacunadas o que hayan dado negativo a una prueba, esa es digamos más o menos la idea del esquema”, dijo en conferencia de prensa la jefa de gobierno.

En este sentido, Sheinbaum afirmó que la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) y la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) están trabajando en un plan para reactivar a este sector económico el cual se mantiene cerrado desde marzo del año pasado cuando se declaró la pandemia por Covid-19.

El golpe para el sector

A principios de este año, y luego de permanecer por varios meses, la Asociación Mexicana de Bares, Discotecas y Centros Nocturnos (AMBADIC) solicitó la apertura inmediata de sus locales, al considerar que ahora se encuentran en peligro cerca de 8 mil 500 negocio del sector.

“El 70 por ciento de los de ocho mil 500 negocios cerrarán definitivamente y dejarán sin empleo a más de 350 mil personas”, advirtió Helking Aguilar Cárdenas, presidente del Consejo Directivo de la AMBADIC, al tiempo que sentenció que ningún negocio puede subsistir 10 meses cerrado y sin apoyo de ningún tipo.

“Los lugares formales que generan empleos, pagan impuestos y servicios vuelven a estar cerrados y la informalidad tolerada al 100 por ciento, es una muestra más del populismo que impera en este gobierno y el abandono al sector empresarial”, destacó en el comunicado.

Los antecedentes 

Ante este escenario, hacia medidos de marzo pasado, se anunció que se permitiría la apertura de los centros nocturnos pero no como antros y bares.

En otras palabras, estos establecimientos podrían abrir sus establecimientos para operar como restaurantes, en donde estará prohibida la venta de alcohol.

Esta condición se suma a que las operaciones deberán llevarse únicamente al aire libre bajo las reglas del programa Ciudad al Aire Libre, mientras que el horario de atención podría extenderse hasta las 23:00 horas, en donde no se especificó si habría días de descanso o la operación se podría mantener toda la semana.

Aunque el esfuerzo busca dar un respiro a este sector, lo cierto es que podría quedar corto si consideramos el tiempo que llevan cerrados estos espacios y que las nuevas condiciones de operación dejan de lado el valor agregado que estos centros nocturnos, antros, bares y cantinas ofrecen a sus visitantes.

Con las declaraciones recientes emitidas por la jefa de gobierno, el avance para este sector podría ser mayor si consideramos que ahora mismo se está vacunando al segmento de mercado más atractivo para los antros y bares cuando menos por grupo de edad.

No obstante, es cierto que estas condiciones y los avales que se tendrán que presentar para poder acceder a estos espacios tienen dos lecturas.Por un lado, pueden ser un lastre en la experiencia del cliente, mientras que por otro presentan grandes oportunidades para ser evadidas.