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El ex ejecutivo de UBS, el italiano Andrea Orcel, demanda al Santander el cumplimiento de la promesa de un trabajo que nunca se llegó a concretar.
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El banco español canceló en enero la propuesta que le hizo tres meses antes.
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Ahora, decidirá la Justicia.
El ex director de la banca de inversión UBS Group AG, el italiano Andrea Orcel, demandó al Santander por 100 millones de euros (US$ 115 millones) después de que el banco español retirara una oferta para contratarlo como director ejecutivo, publicó Bloomberg.
Orcel presentó una demanda por el incumplimiento del contrato, aún cuando nunca llegó a trabajar a la entidad financiera que dirige Ana Botín.
La cantidad que reclama el ejecutivo es aproximadamente el doble de lo que el Santander le había ofrecido. “La compañía le había prometido un sueldo de 50 millones de euros pero después declinó ficharlo como ejecutivo de la firma”, publicó El Confidencial.
El banco había anunciado en septiembre de 2018 la contratación de Orcel como CEO de la entidad para todo el grupo que tiene operaciones en Europa y América.
Sin embargo, la llegada al cargo nunca se materializó debido a que a comienzos de 2019 el Santander decidió cancelar el ingreso diciendo que su contratación suponía un alto costo para la firma.
El banco le había prometido un salario de 50 millones de euros durante el primer año, pero la retiró. La entidad bancaria explicó que para contratarlo tendría que pagarle una indemnización que era “un costo inaceptable”.
El banco creía que UBS sería la que se haría cargo de esa cláusula, algo que la entidad suiza rechazó.
Todo listo
Orcel dijo que ya había asumido compromisos en Madrid para prepararse para la mudanza, cuando le avisaron que se cancelaba el ofrecimiento.
Explicó también que le faltaban unos pocos días para hacer el pago inicial de una casa en la capital española y que su hija ya había sido aceptada en su nueva escuela, publicó el Financial Times en una entrevista en mayo. “No soy de los que dejan pasar las cosas si creo que no es lo correcto”, dijo.
Ahora, Orcel está considerando fundar un banco de inversión “boutique”. Si bien la decisión no está tomada, ha tenido conversaciones informales con pequeños bancos de inversión y grandes rivales de UBS en ambos lados del Atlántico, así como con empresas de tecnología de Silicon Valley, dice Bloomberg.
Luego de la frustrada contratación de Orcel, el Santander optó por dejar en el cargo de consejero delegado a José Antonio Álvarez. Además, debió retrasar la presentación de su plan estratégico.
Antes de que se terminara de romper la relación entre las partes, y para tratar de encarrilar la situación, el banco le ofreció un puesto de asesor con un salario alto, lo que fue rechazado por el italiano.