La tendencia de implementar tecnología a la mayoría de las actividades diarias del ser humano sigue a la alza -según IAB México, el 84 por ciento de los mexicanos cuenta con un dispositivo móvil– y como era de esperarse. el sector de la economía es uno de las que más se ha visto favorecido. La banca móvil es una realidad latente en México y para el 2020 se pronostica que el país azteca sea líder mundial en el terreno de los pagos móviles.
Sin duda alguna, la tecnología móvil representa muchísimas ventajas para la banca ya que principalmente sirve como un mecanismo de inclusión al mundo financiero, cuyo conocimiento en la actualidad es necesario para gozar de salud económica.
Según el centro de Servicios Financieros de Deloitte, en los siguientes cinco años la banca móvil dejará de ser una elección para convertirse en una necesidad, hecho que ya es palpable al observar como la mayoría de los bancos ponen a la banca móvil como componente esencial de sus estrategias de comercio y atracción de nuevos clientes.
Y es que las ventajas ofrecidas por este servicio son claras: mayores ingresos para los bancos gracias a la obtención de información clave de los clientes como sus hábitos, ahorro de costos para las empresas que evidentemente necesitarán menos recursos humanos y una mejor experiencia para el cliente.
De acuerdo al Estudio a Atención al Cliente de Servicios Bancarios del 2016 del Departamento de Investigación de Merca 2.0, el 23.7 por ciento de los usuarios mexicanos de Banca Móvil -que actualmente alcanza las 4 millones de personas- prefiere los servicios ofrecidos por BBVA Bancomer, mientras que el grupo Citibanamex y Santander empatan en segundo lugar con 19.7 por ciento de los usuarios.
Los usuarios digitales de BBVA Bancomer y Banamex perciben así la efectividad de la banca móvil ofrecida por estas instituciones: