Avianca Brasil es la tercera línea aérea más importante en el país más grande de América latina. En 2017, declaró ingresos por casi mil millones de dólares (3.520 millones de reales), un 25% más que dos años antes.
Además, según una encuesta realizada este año por Clint, es la tercera línea aérea por la preferencia de los usuarios, luego de Gol y de Tam Airlines (ahora Latam).
Es por esto que cobra importancia la novedad de este martes: Avianca Brasil se declaró en bancarrota, aunque aseguró que los pasajeros no tendrán, por ahora, cancelaciones de vuelos.
“Debido a la resistencia de los arrendadores (de sus aviones) para llegar a un acuerdo, hemos presentado una solicitud de protección de los acreedores para proteger a los clientes y pasajeros”, dijo la compañía en un comunicado. El detalle de lo que dice la marca en Facebook.
Al menos por ahora, no se espera que las operaciones se vean afectadas. “Los pasajeros pueden tener total tranquilidad para hacer reservaciones y comprar boletos, ya que todas las ventas serán respetadas y los vuelos estarán en funcionamiento”, dijo la empresa, aunque, por supuesto, se generaron dudas.
La aerolínea tiene deudas por casi 493 millones de reales (unos US$ 127 millones) con múltiples acreedores.
Avianca Brasil es una marca de Oceanair Linhas Aereas SA (Oceanair), y no forma parte del grupo Avianca Holdings SA, con sede en Colombia. La relación entre ambas aerolíneas es que son parte de un holding liderado por el mismo inversor, German Efromovich.
Sin embargo, comparten el logo y toda la identidad de marca, lo que inevitablemente hará que las noticias de una bancarrota perjudiquen a su par colombiana.
Qué pasó
La aerolínea está en deuda con varios acreedores, entre ellos, el conglomerado petrolero estatal Petrobras y con el aeropuerto de Sao Paulo, Guarulhos. Según el diario brasileño de negocios Valor, Avianca Brasil tiene rutas nacionales e internacionales con 60 jets y enfrenta juicios por el retorno de 26 aviones y 52 motores.
La aerolínea registró pérdidas netas en el primer semestre del año de 175,6 millones de reales, un 24,4 por ciento más que en el mismo período del año pasado.
Avianca no dio estos detalles, pero la medida se produce después de que fuera acusada por la compañía irlandesa Constitution Aircraft Leasing de no pagar las cuotas de 11 aeronaves.
Avianca dijo en ese momento que estaba tratando de ajustar su flota a los cambios en los precios de los combustibles.
Las aerolíneas brasileñas vienen luchando contra una fuerte caída en el real frente al dólar debido a la frágil recuperación económica y la incertidumbre política. Recordemos que el polémico Jair Bolsonaro es el presidente electo de ese país.