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La decisión para asegurar los establecimientos del Cruz Azul fue tomada por el juez Jonnathan Julián Molina
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En la CDMX, las oficinas afectadas están en Periférico Sur, en la colonia Pedregal de Carrasco
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Por su lado, los inmuebles de Hidalgo y Oaxaca están en las carreteras Tula-Tepejil del Río y Coatzacoalcos-Salina Cruz
De acuerdo con El Universal, un juez de la Ciudad de México (CDMX) acaba de ordenar a Cooperativa Cruz Azul poner a disposición del Consejo de Administración sus instalaciones en la alcaldía Coyoacán. A raíz de este evento, en la madrugada se aseguraron las oficinas de la organización. Junto con el inmueble, las autoridades también dispusieron que se entregaran los contenidos del espacio. Entre ellos, bienes, maquinaria y equipo dentro del edificio.
La orden firmada por el juez apunta que se ha autorizado el uso de la fuerza pública para el cumplimiento de este mandato. Esto incluye el rompimiento de cerraduras, de ser necesario. Así, se giraron oficios a la Secretaría Ciudadana de la CDMX para que ayudaran al Consejo de Administración a asegurar los bienes y ponerlos a disposición de Cooperativa Cruz Azul. A la vez, se dieron órdenes similares para las plantas en Tula-Tepejil, Hidalgo y Lagunas, Oaxaca.
También en datos de El Universal, se espera que el 26 de agosto se convoque la Asamblea General Extraordinaria que ratifique a Guillermo Álvarez Cuevas como director general. En la misma reunión se espera que Cruz Azul elija a los Consejos dentro de la organización. En este sentido, según El Universal Deportes, no se invitó a Víctor Manuel Velázquez y José Antonio Marín a la reunión. Los líderes disidentes encabezan los grupos de Administración y Vigilancia.
¿Una nueva crisis de marca para el Cruz Azul?
No es la primera vez que el equipo de fútbol se mete en problemas con las autoridades. En marzo de 2019, se le acusó a la Cooperativa Cruz Azul de participar en actos irregulares. Lo anterior, por presuntamente haber destinado fondos a empresas fantasma y a paraísos fiscales desde 2006. A finales del año pasado, el presidente Billy Álvarez empezó a ser investigado por Estados Unidos (EEUU). Esto, a raíz de varias acusaciones en torno a enriquecimiento ilícito.
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Con este nuevo incidente, la reputación de marca del Cruz Azul vuelve a verse en jaque. El hecho que se le hayan asegurado sus oficinas por parte del Consejo de Administración habla de forma negativa sobre la forma en la que se han desenvuelto los conflictos internos. Para un equipo de fútbol con tanta tradición como éste, puede generar incertidumbre a sus fanáticos sobre el futuro de la organización. Pero probablemente no sea lo más grave de todo el caso.
Lo más duro es el hecho que se haya decidido involucrar a las autoridades y la fuerza pública. Por lo general, el uso de la policía y las unidades de la Secretaría Ciudadana tienen una gran connotación negativa contra cualquiera que esté en el otro extremo. En este sentido, aún si las oficinas de Cruz Azul solo están cediéndose a una facción interna, la imagen de la marca se está deteriorando. Y mientras no se detenga el conflicto, no se podrá empezar su reparación.
Algunas claves para lidiar con conflictos internos en la compañía
Sería exagerado decir que el Cruz Azul es la única organización que se ha visto afectada por un conflicto interno. Por ejemplo, el caso de Carlos Ghosn en Nissan tuvo consecuencias muy graves en el rendimiento de la automotriz, que aún se sienten hoy en día. El caso de fraude de Wirecard fue, con cada vez más claridad, causado por malos manejos entre sus directivos. Y en Volkswagen, el escándalo del Dieselgate también provocó una enorme pelea en sus filas.
¿Pueden hacer algo las compañías e instituciones para evitar la incidencia de eventos como el que está aquejando al Cruz Azul? De acuerdo con The Business Journals, es importante que se involucre a los directivos, líderes y asesores para detener y mediar las peleas para que no se vuelvan más grandes. Según Chron, resulta fundamental tener una guía para conciliar todas las discusiones. Y Orega dice que lo más importante es no ignorarlas y mejor lidiar con ellas.