De inicio, a mí no me llegó ninguna notificación para la vacuna, pero el pasado domingo entré al portal de mivacuna.salud.gob.mx y metí mi CURP para ver si ya había algo de información al respecto. Mi sorpresa fue mayúscula cuando vi que ya estaba generado el documento de mi cita el martes 18 de mayo a las 9:00 horas en el Centro de Estudios Superiores en Ciencias de la Salud (CENCIS-Marina), ubicado al sur de la Ciudad de México (CDMX), en Calzada de la Virgen No. 1800, Colonia San Pablo Tepetlapa.

Acudí puntual a la cita, llevando conmigo la impresión de la cita y el llamado Expediente de Vacunación contra el Virus SARS-CoV-2, en total, dos hojas. Llegué un poco antes de la hora indicada, pues en el documento decía claramente que no había que llegar con mucho tiempo de antelación.

A las 9:00 horas estaba entrando al estacionamiento de esa sede educativa, donde se está llevando la vacunación, donde sientan a uno en una mesa para revisar documentos, donde una persona pone a mano las respuestas a una pequeña lista de preguntas adicionales, como padecimientos crónicos, diabetes o hipertensión, o en el caso de mujeres, estados temporales, como embarazos. También, preguntan por un correo electrónico y dos teléfonos de contacto (suponemos que para la parte de farmacovigilancia).

Una vez que se llena esta ficha, nos conducen a otra mesa, ya de vacunación, donde alrededor de ella nos sentamos seis personas; en la cabecera hay dos enfermeras que explican cómo será la aplicación de la vacuna, el tipo de reacciones que puede haber y ofrecen una serie de recomendaciones, como la de darse una ducha al llegar a casa, tomar paracetamol en caso de dolor de cabeza, y por tratarse de esta vacuna CanSino, de una sola dosis, no consumir alcohol en un mes ni fumar, de ser posible.

Después, se procede a la inyección; de inicio, una de las enfermeras muestra los frascos de la vacuna y, luego, los va abriendo, mientras su compañera va haciendo las distintas aplicaciones. Cuando se concluye el proceso de los seis ahí presentes, pasan a todas las personas de esa mesa a un área de observación, donde hay que estar al menos 30 minutos, para ver si no hay alguna reacción secundaria.

Entre tanto, mediante altavoces, la gente de apoyo todo el tiempo recuerda que a pesar de haber recibido la vacuna, uno no debe bajar la guardia, y por el contrario, debemos seguirnos cuidando como en los últimos 14 meses, porque uno no queda inmunizado de inmediato, pues deben pasar de 14 a 28 días para que la vacuna haga su efecto.

También recuerdan que la vacuna tiene una efectividad de entre 90-95% y que aún así hay un riesgo de enfermar de Covid, pero la ventaja es que si uno contrae la enfermedad, no iremos a parar al hospital y menos fallecer por ello.

En el área de observación las brigadas pasan a cortar la mitad de la hoja del Expediente de Vacunación, que es la constancia de que fuimos vacunados. Una parte la conserva la persona recién inmunizada, y la otra, se la queda la autoridad, con el fin de llevar el registro de población vacunada. Una vez concluida la media hora de observación, nos conducen a la salida y es todo. Desde que uno entra a la salida, 45 minutos. De no creerse.

A pesar de que hay mucha de gente de apoyo, personal de salud, militares, marinos y las personas de las famosas brigadas de vacunación, en ningún momento se hace proselitismo de nada. Todos están ahí para ayudar y el mecanismo funciona bien y rápido. Ojalá así funcione en todos lados. Felicidades a los organizadores por la logística.

12% de la población, ya vacunada

A decir de López-Gatell, subsecretario de Promoción de la Salud, cuestionado en la tradicional conferencia vespertina, a la fecha 12% de la población ha recibido la vacuna anti Covid, es decir 10 millones 652 mil 500 personas. Esto explica, en parte, el por qué la epidemia de Covid 19 va en descenso a lo largo y ancho del país (exceptuando quizás a Quintana Roo).

Sin embargo, advirtió que la pandemia causada por el coronavirus no ha cedido ni en México ni en el mundo, por tanto, no debemos bajar la guardia. Esto a pesar de que la cifra de personas fallecidas ha sido la más baja, solo 56 personas.

El funcionario federal enfatizó: “La pandemia va en descenso, muy consistente y sostenido, cerramos ya 17 semanas consecutivas de reducción y por los datos que se visualizan, ya para la semana 18 y 19 vemos que la tendencia se conserva, lo cual no quiere decir que se acabó la pandemia”, dijo.

La indispensable investigación clínica

En el marco de la celebración del Día Mundial de la Investigación Clínica, Roche México llevó a cabo el Panel “Investigación clínica, un aliado en salud pública”. En dicho foro, Germán Fajardo, director de la Facultad de Medicina de la UNAM, expresó: “La investigación científica es indispensable en el desarrollo de cualquier país. En particular la investigación clínica es un tema que debemos seguir impulsando con mayor ímpetu con inversión en infraestructura y recursos humanos adecuados, particularmente médicos y enfermeras”.

Y continuó: “Tenemos en el futuro muchas oportunidades que aprovechar en este campo para lograr un mejor posicionamiento de México en esta área, que impacten en problemas de salud pública tan importantes como las enfermedades no transmisibles principalmente”.

El ejemplo más claro de la importancia de la investigación clínica es el reto de salud que ha representado el virus Sars-Cov-2, para lo cual se ha emprendido un gran esfuerzo en todo el planeta, desde investigadores, académicos, especialistas, autoridades sanitarias e industria químico-farmacéutica, entre otros, han desarrollado en tiempo récord vacunas anti Covid, pruebas diagnósticas y posibles tratamientos para ayudar a reducir el impacto de esta pandemia. Enhorabuena.

El Botiquín

Como sabemos, en este mes de mayo se recuerda la importancia de la hipertensión, por lo cual también es importante traer a la mesa la prevalencia de la hipertensión pulmonar (HP) en México, donde se estima entre 15 y 60 casos por millón de habitantes, con una incidencia anual de 5-10 casos por millón. Esta enfermedad es más común en mujeres de 35 a 55 años, con una relación de tres mujeres por cada hombre. Cuidado, además es frecuente en personas que toman medicamentos para bajar de peso, así como en personas que tienen VIH o alguna cardiopatía congénita.