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Atrium buscaba crecer a partir de un modelo de negocio disruptivo en el mundo de los asuntos legales
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Pero no logró asentarse por la fuerte competencia y los altos costos y finalmente cerró
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HabĆa sido fundada por Justin Kan, el creador de la plataforma de juegos Twitch, que luego adquirió Amazon
Cerró Atrium, la compaƱĆa fundada en los Estados Unidos para crecer en el mercado de los litigios legales relacionados con las startups.
Altrium estaba fundada sobre dos pilares: Atrium Limited Liability Partnership (LLP) y Atrium Legal Technology Services (LTS).
Atrium LLP era un bureau de abogados enfocado a startups, formado por especialistas de grandes compaƱĆas que trabajaban con una tarifa plana mensual.
En paralelo, Atrium LTS era el brazo tecnológico, la empresa de desarrollo que creaba el software que el bureau necesitaba.
“Atrium era algo asĆ como como un despacho de abogados con un brazo tecnológico personalizado y exclusivo; o tambiĆ©n podĆa verse de la otra forma, como una empresa de desarrollo ‘legaltech’ con un brazo legal personalizado y exclusivo”, lo describe muy bien Legaltechies.
Toda esta explicación es tan interesante como inútil esta altura de los acontecimientos, porque la firma confirmó su cierre.
La startup dejó de funcionar al no poder encontrar la manera de funcionar en el competitivo mercado de abogados y bufetes, publicó TechCrunch.
Despidió a todos sus empleados, unos 100 y devolverÔ parte de los US$ 75,5 millones en fondos que recibió de inversores. Puntualmente, cierra el brazo tecnológico, porque por ahora la firma de abogados Atrium, ya separada, continuarÔ operando como una empresa del sector clÔsica.
“Estoy agradecido a los clientes y a los miembros del equipo que llegaron hasta aquĆ conmigo y con nuestros inversores. Es lamentable que este no fuera el resultado que querĆamos, pero estamos agradecidos a todos”, le dijo al mismo medio Justin Kan, el tambiĆ©n fundador de Justin.tv, que luego se convirtió en la exitosa plataforma Twitch, vendida a Amazon por US$ 970 millones.

Atrium habĆa dado muestras de problemas en enero, e intentó sobrevivir despidiendo a sus abogados para convertirse en una startup de software mĆ”s pura y con mejores mĆ”rgenes. Pero no le fue bien. Algunos de esos abogados formaron una firma legal independiente y contrataron a muchos de los pocos clientes que le quedaban a Atrium, y todo se precipitó.
Fundada en 2017, Atrium creó un software especial y colaborativo para empresas incipientes, para que pudieran navegar en el complejo mar de la recaudación de fondos, las contrataciones y los acuerdos de adquisición.
Atrium tambiĆ©n ofrecĆa abogados propios para asesorar a las empresas en estos asuntos por una suscripción mensual de entre 500 y 2.000 dólares.
La idea era que el software colaborativo hiciera que sus abogados fueran mĆ”s eficientes que un bufete de abogados tradicional, para que pudieran hacer el trabajo mĆ”s rĆ”pido, que se traducirĆa en ahorros para los clientes y para Atrium.
La compaƱĆa trató de generar clientes nuevos organizando talleres de recaudación de fondos para nuevas empresas liderados por Kan, que contaba su historia de cómo fundó Twitch.
Este lĆder carismĆ”tico, con casi 1.000 millones de dólares ganados, eran la promoción ideal. Pero no fue suficiente.
Entre los problemas que tuvo es que llegó a competir en un mercado como Silicon Valley atestado de despachos de abogados ya asentados.