Establecer mejores relaciones con los empleados, es sin duda una necesidad para muchas empresas de cara a un año que promete ser especialmente importante para alcanzar buenos niveles de recuperación. En este sentido lo que ahora pasó en Target es quizás el escenario del que cualquier marca se quisiera alejar.
Y es que si bien la renuncia de un elemento no siempre es negativa, lo cierto es que cuando este proceso se da de maneras poco habituales o en donde se rompen los protocolos no escritos al respecto si puede ser un llamado de alerta.
Una épica renuncia en Target
De acuerdo con lo informado por diversos medios, una mujer en Estados Unidos, que ha sido identificada como empleada de la cadena de supermercados Target renunció a su trabajo de una manera peculiar. Simplemente dejó una nota sobre el escritorio de su jefe en donde con pocas palabras dejó en claro su descontento de trabajar en aquel lugar.
A principios de este mes, la exempleada subió la imagen de su nota a la red social Reddit, donde su conducta recibido toda clase de comentarios encontrados.
En la peculiar nota, se lee: “¡Hey, Jordan! Solo te quería decir que no voy a volver a trabajar mañana, ni la semana que viene. ¡Gracias cariño!”.
El peculiar escrito fue acompañado por una posdata en la que la mujer dice no entender porque su superior siempre fue “ tan rudo”.
De esta manera, la imagen de la nota ha generado cerca de mil 300 votos positivos, en donde la gente ha aplaudido la decisión de la mujer, mientras que otras han criticaron la forma de “cerrarse las puertas” al no notificar de su salida bajo protocolos más formales que pudieran, entre otras cosas, proteger al equipo con el que esta mujer laboraba.
El reto como empleadora
Más allá de los comentarios generados, lo cierto es que para Target (al igual que para las otras marcas) trabajar sobre estos asuntos es fundamental, más en un momento en el que la crisis ha puesto un nuevo reto a las marcas desde su rol de empleadoras.
El pesimismo reina en el sector empresarial. De hecho, de acuerdo con una reciente encuesta firmada por Vestiga Consultores, 6 de cada 10 empresas espera recuperarse de la crisis económica causada por la pandemia hasta 2022 o incluso después.
En términos generales, el escenario propone una caída en las inversiones que, por definición pegará de manera directa a la cadena de producción de valor.
En medio de este proceso, el reconocimiento que los empleadores puedan dar a sus empleados jugará un rol vital y cuando menos, hasta ahora, este aspecto parece estar descuidado.
Según OCC Mundial, para el 79 por ciento de las empresas el desempeño de sus empleados es desde normal a muy alto. No obstante, el 49 por ciento de los empleados asegura que su trabajo ha sido poco valorado durante la cuarentena.
Cubrir este aspecto será fundamental para alcanzar los objetivos planteados por las marcas, en un entorno que luce especialmente complejo ante una economía contraída.
Hablamos de la capacidad de retener al talento, en una suerte por evitar gastos de capacitación y capitalizar la experiencia de los colaboradores existentes.
Si a este escenario se suman este tipo de renuncias que dejan ver un ambiente laboral poco favorable, el reto es aun mayor.