• De la mano de Claro, Twitter quiere presentar contenido secundario relacionado con los Juegos Olímpicos de 2020

• Con Televisa, la red social se quiere enfocar en eventos de fútbol, mientras que con TV Azteca hará proyectos en esports

• Junto a Viacom, se espera que la plataforma invierta en múltiples premiaciones del mundo de la TV y la música

Una de las áreas de mayor competencia a lo largo de prácticamente todas las industrias es la producción de contenido. Cada vez más plataformas de streaming quieren presentar sus propias opciones de nicho para llamar la atención de los consumidores. Algunas empresas de servicios, como MailChimp, están apostando fuerte a producciones de calidad para reforzar su reputación de marca. Y, por supuesto, las redes sociales buscan más y mejores materiales.

No es sorprendente que el contenido se haya vuelto una herramienta tan frecuente para atraer a los usuarios. De acuerdo con Optinmonster, estos materiales son una de las formas más efectivas para promover negocios. Tanto que, al menos la mitad de los mercadólogos piensan usar estas estrategias para incrementar su audiencia. Además, en cifras de Word Stream, su tasa de conversión no tiene igual: 2.9 por ciento, frente al 0.5 promedio de otras técnicas.

Hay una consecuencia interesante de esta preferencia por el contenido. De por sí, la lucha por el tiempo de los consumidores es una de las más intensas y difíciles de ganar. Pero conforme más empresas y plataformas se van sumando a esta tendencia, hay cada vez más alternativas en el mercado. Esto, a su vez, hace más difícil poder conseguir interacciones de calidad con las audiencias. Sin embargo, hay una empresa que está considerando una alternativa: Twitter.

#TwitterFrontsMx, una propuesta de contenido second-screen

Hoy, la red reveló un proyecto de contenido premium para México. En su TwitterFrontsMx, la plataforma presentó más de 40 acuerdos para la transmisión de eventos especiales para fans de entretenimiento, deportes y premiaciones. Asimismo, presentó seis contenidos exclusivos, de la mano de Claro, Televisa, TV Azteca y Viacom. El objetivo es, según el vicepresidente de alianzas Kay Madati, “brindar a las marcas una conversación genuina con su audiencia”.

Twitter apuntó que esta propuesta de contenido está enfocada a la experiencia de la second screen. Es decir, proporcionar materiales que acompañen y complementen a lo que los usuarios están consumiendo en las transmisiones principales, ya posicionadas y populares. Melissa Barnes, vicepresidenta de la red social CanLatam, aseguró que este enfoque les permite tener una audiencia altamente involucrada en la experiencia de video de la plataforma.

Colaborar, en lugar de competir

La mayoría de las redes sociales han presentado propuestas de contenido a lo largo de sus plataformas. Instagram presentó hace unos días una función de Stories para grupos, así como una nueva cuenta para fomentar el trabajo de sus creadores, en un empuje por aumentar su audiencia. Herramientas como FaceApp le han ayudado a estos sitios a incrementar los posts e interacciones entre su audiencia. También cabe recordar los intentos de Facebook y Tinder.

Es interesante el enfoque de Twitter con respecto a su estrategia de contenido. La marca asegura que quiere empezar a desarrollar un proyecto en donde saque el mayor provecho a su audiencia. En este sentido, apunta que el second-screen es una gran opción para continuar ofreciendo espacios de alta calidad para sus anunciantes sin entrar en conflicto con otros agentes. Mejor aún, este enfoque le dejaría desarrollar una alianza mucho más cercana.

¿Podría ser que el futuro de la producción del contenido esté en producir contenidos entre varios agentes? Ciertamente es una idea atractiva. De esta forma, las diferentes empresas y productoras podrían alimentarse mutuamente de sus audiencias. Y al crear materiales en una ejecución conjunta, es más probable que los efectos de esta estrategia en la discusión en redes sociales sean mucho más amplios. Parece un ganar ganar para todos los involucrados.

Solo quedaría definir qué tipo de contenido es en el que estarían dispuestos a colaborar las redes sociales como Twitter y los otros productos. Y, por supuesto, las condiciones del trato.