·Valor de mercado de máscaras faciales han llegado a los 37.16 miles de millones de dólares en todo el mundo durante este 2020

·La OMS señaló que no es necesario que todas las personas lleven cubrebocas, si no están enfermos

·Con el paso de los años las mascarillas han aumentado su relevancia, sobre todo en países asiáticos

Mucho se ha hablado sobre si las mascarillas son realmente efectivas o no, o si la sana distancia lo es. Incluso entre las medidas que se ha anunciado las autoridades es que el cubrebocas debe ser usado sólo en lugares donde hayas más personas al rededor.

Entre las industrias beneficiadas por esta pandemia, es justo las que se dedican a comercializar con estos productos pues con la actual pandemia han tenido mucha demanda entre los usuarios que buscan protegerse del COVID-19.

Pero además marcas de alta gama han lanzado al mercado cubrebocas  a costos excesivos, como la marca Urban Outfitters, Louis Vuitton, incluso Fendi.

Datos por The Lancet, señalan que la posibilidad de transmisión sin máscaras y respiradores es del 17.4 por ciento y esto se reduce a sólo el 3.1 por ciento cuando se usan.

Valor de mercado de máscaras faciales han llegado a los 37.16 miles de millones de dólares en todo el mundo durante este 2020 y de acuerdo con datos de Statista, estos podrían llegar a los 39.57 para 2021 y hasta 42.14 miles de millones para 2022.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud señaló que no es necesario que todas las personas lleven cubrebocas, si no están enfermos, además que estas deberán de ser cambiadas constantemente pues pueden guardar un virus si no se hace.

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¿Cuál es la efectividad de estas mascarillas?

·Están las mascarillas más sencillas que puedes hacer desde tu casa, están no cuentan con una efectividad comprobada, sin embargo ayudan a reducir el alcance de la exhalación cuando uno está enfermo.

·Otro tipo de mascarilla son la de quirófano, usadas por el personal médico y enfermos para proteger al resto de las personas de los síntomas de la enfermedad.

·Por otro lado las mascarillas autofiltrantes (FFP2/FFP3), protegen al usuario de diferentes partículas, por lo que son más costosas que las anteriores y usadas en sectores en particular.

La relevancia de las mascarilla en la actualidad y el futuro

Anteriormente mencionamos como las mascarillas aumentarán su valor en los años futuros, pero esto no es algo reciente, pues con el paso de los años han aumentado su relevancia, sobre todo en países asiáticos.

Esto con relación a la salud claramente, imagina que de 2018 aumentaron su valor de 32.76 a 34.89 miles de millones de dólares a nivel mundial, incluso de acuerdo con Statista para el 2025 podrían aumentar hasta 50.91 miles de millones de dólares.

Lo que tiene sentido si consideramos el origen de la actual pandemia y anteriores. Verás, la Organización Mundial de la Salud señala que este virus se identifico por primera vez en Arabia Saudita en 2012 y asegura que los datos sobre su transmisión gravedad e impacto clínico son muy reducidos.

El coronavirus cuenta con una extensa familia de virus y algunos de los cuales pueden ser causa de diversas enfermedades humanas que van desde un resfriado común hasta síndrome respiratorio agudo severo.

Desde el 2012 hasta el 8 de octubre de 2019 se notificaron a la OMS un total de 2470 casos de infecciones por coronavirus, hoy ya son más de 6 millones de casos confirmados alrededor del mundo.

El 11 y 12 de enero de este año la OMS recibió información sobre un nuevo brote e informo que se encontraban estudios en curso para tomar las medidas de respuesta aplicadas en Wuhan.

También informó de la secuencia genética del nuevo coronavirus, que fue de gran importancia para que otros países puedan desarrollar kits de diagnóstico específicos.

Impactos de una pandemia:

Es cierto que una epidemia tiene resultados muy negativos almacenando altas tasas de letalidad. Un ejemplo de esto es la crisis en Rwanda en 1994, cuando varios brotes de cólera causaron al menos 48 casos y 23 800 muertes en el intervalo de unos meses, en los campamentos de refugiados en Goma, en el Congo.

Pero anteriormente, en 1817 cuando esta se considero pandemia porque empezó en Asia sudoriental y se propagó a otras partes del mundo, esta fue la primera y le suscitaron muchas otras, como la séptima ola pandémica de cólera que se propagó rápidamente a otros países de Asía, Europa, África y en 1991 llegó a América Latina.

Cuando los brotes de cólera pasaron de ser considerados epidemia a pandemia, las reacciones de pánico, propiciaron una desorganización estructural social y económica. Estos resultados dificultan el desarrollo de las comunidades afectadas.

Algo que ya estamos viviendo con este coronavirus, pero además, de las reacciones de pánico injustificadas, están las restricciones de los viajes desde los países en que ya se haya declarado el brote, o a limitación de las importaciones de ciertos alimentos.

Por ejemplo, el brote de cólera de 1991, que mencionamos antes, le costo a Perú 770 millones de dólares, por embargos impuestos al comercio de alimentos y a los daños que sufrió el turismo.