Derivado de las recientes tensiones diplomáticas entre el Reino Unido y Rusia luego del envenenamiento de un ex agente de inteligencia ruso, así como de su hija, el deporte podría verse afectado. Las represalias de Londres contra Moscú podrían repercutir en los equipos pertenecientes a la English Premier League (EPL) Chelsea y Arsenal, y sus dueños de origen ruso Roman Abramovich y Alisher Usmanov.
“Nuestra disputa es con el Kremlin de Putin. Y con su decisión. Creemos que es abrumadoramente probable que fuera su decisión usar un agente neurotóxico en las calles del Reino Unido. En las calles de Europa. Por primera vez desde la segunda Guerra Mundial”, afirmó el ministro de Exteriores británico, Boris Johnson.
De acuerdo con la jugada financiera, en caso de adoptarse medidas contra los oligarcas rusos en territorio británico, “nadie recibirá un trato preferencial, independientemente de su estado. Se buscaría empresarios rusos que brinden apoyo material e interacciones financieras corruptas con el régimen de Putin”.
EL gobierno de Rusia expulsó a 23 diplomáticos residentes en ese país, en respuesta a una decisión exactamente igual por las autoridades británicas. Asimismo, cerró el consulado de San Petersburgo, así como el British Council de Moscú, al tiempo que se esperan nuevas consecuencias.
Según el Daily Express, Theresa May, podría estar barajando la posibilidad de actuar en contra de los oligarcas rusos con intereses en suelo británico. Ése es el caso de Usmanov y Abramovich, con fortunas de 11 y 6 millones de libras respectivamente; y a los que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha situado entre las 210 grandes fortunas rusas con estrechos vínculos con Vladimir Putin.