-
Argentina presentó un plan de subsidios y ayuda a empresas y personas por el coronavirus
-
La crisis era grave en el país por la situación económica, y ahora se espera que se profundice
-
Hasta ahora los infectados por el virus no llega a 70, pero las autoridades dicen que el número crecerá
Si algo le faltaba a la crisis de Argentina era que una pandemia de un virus desconocido ingresara a su territorio. Y tuvo que pasar.
Con casi 70 casos confirmados y varios cientos en estudio, el coronavirus está en el país y las autoridades se preparan para enfrentarlo.
Más allá de las defensas sanitarias, que incluyen el cierre de fronteras, las reducciones horarias en los trabajos, la clausura de los colegios y las escuelas y las restricciones en los medios de transporte interno, hay un plan económico/financiero que se puso en marcha esta semana.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, dijo que el gobierno “está para tomar medidas decisivas”. En esa línea, adelantó que va a generar un sistema de precios que establezca máximos a los cuales deberán comercializarse ciertos productos dentro del mercado interno por 30 días, publicó Clarín.
Por otra parte, el gobierno que lidera el peronista Alberto Fernández dijo que el Estado se hará cargo de parte del salario de “sectores críticos” de la economía y que se eximirá a las empresas temporariamente, del pago de contribuciones patronales.
Puntualmente, las compañías beneficiadas son las más afectadas por la crisis del coronavirus: las que dedican a actividades de esparcimiento, como cines, teatros, el turismo y el transporte de pasajeros y los hoteles.
“Lo que va a hacer el Estado es ayudar pagando una parte del sueldo de los trabajadores y también se va a reforzar el pago de seguro de desempleo”, dijo Guzmán en una conferencia de prensa del lunes 17 por la noche.
Además, se hará un pago extraordinario a la personas que reciben la asignación universal por hijo y a las jubilaciones mínimas.
Por otra parte, se dijo que se va a incrementar en 100 mil millones de pesos (unos US$ 1.500 millones) el presupuesto para la inversión en obra pública, que va a estar destinado a obras viales, a refacciones de viviendas, escuelas y turismo.
En paralelo, los bancos están lanzando promociones y descuentos para la compra de alimentos y créditos blandos, con el aporte estatal.
“Las estrategias van desde descuentos en las compras online en supermercados, hasta líneas de créditos a tasas preferenciales dirigidas a empresas, con el fin de que se equipen con herramientas que les permitan a sus trabajadores desarrollar home office”, publicó iProup.
En el sector bancario ven a la crisis del coronavirus como una oportunidad (lamentable, pero real) para digitalizar y sumar nuevos servicios.
Como está pasando en el resto del mundo, los grandes supermercados y en especial los mayoristas están viendo incrementar sus ventas de forma explosiva, a diferencia de otros segmentos de mercad, como los que venden indumentaria o productos que no son de extrema necesidad.
“Costco, en los Estados Unidos, registró un fuerte crecimiento de las ventas durante su último trimestre a partir de que cada vez más compradores fueron a abastecerse de productos de limpieza, artículos para el hogar y alimentos debido a la extensión del brote de coronavirus”, publicó CNN Business.
La compañía dijo la semana pasada que sus ventas comparadas anualmente aumentaron un 9,1% durante el trimestre diciembre-febrero. Sólo en febrero, crecieron un 12,4%.
Con la pandemia en avance, muchos buscan abastecerse por miedo a quedarse sin stock y algunos retailers están vendiendo más de lo esperado, incluso por encima de sus posibilidades de reposición. Un supermercado en Agrentina dijo que vendió el fin de semana pasado lo mismo que en Navidad.
Los comercios de ropa, electrónicos, electrodomésticos, calzado y cientos de otros rubros, por el contrario, no tienen consumidores.
Decenas de empresas ya han decidido cerrar preventivamente, como Nike, Under Armour, Patagonia, Apple, Urban Outfitters y Abercrombie & Fitch, entre otros.