Se puede decir que el correo electrónico es el medio más utilizado para las comunicaciones internas y externas. Cada día se envían en el mundo millones de correos electrónicos, tanto personales como profesionales. Si tienes que enviar un mail del segundo tipo, debes saber que no todo vale y que la redacción del correo electrónico es algo que debe ser cuidado al detalle para causar una muy buena impresión.
Por si no lo sabías, el uso del correo electrónico es tan importante que su redacción debe ser igual a la de una carta formal, para que así proyectes una imagen de ti perfecta. Pero, ¿sabes cómo redactar un mail de forma correcta? Si no lo sabes, no te preocupes porque te vamos a mostrar algunos consejos para que la redacción de tus correos sea totalmente perfecta y formal.
Una de las primeras cosas que tienes que tener en cuenta al redactar un mail es que es bueno establecer cierto límite con tu interlocutor, sobre todo si se trata de un correo electrónico profesional. Es por eso por lo que tienes que evitar frases como “espero que estés bien”, “te deseo un lindo día” o “espero que todo se haya entendido”.
Para el asunto del mail nunca utilices frases largas y en los saludos o despedidas utilices frases de plantilla. Además, debes cuidar la dirección del destinatario. Asimismo recuerda que un correo no es un chat, así que cuida la gramática y ortografía y evita el uso de los emojis. La brevedad es también muy importante, así que no escribas demasiado ni adjuntes demasiados archivos ya que corres el riesgo de que no te lean.
Eso sí, si pretendes abordar un tema importante (ya sea un aumento de salario o un problema con alguno de tus compañeros o jefes) es mejor que lo hagas cara a cara y no por mail ya que puede terminar en manos equivocadas.
Tu dirección de mail es muy importante a la hora de redactar un correo profesional. No debes utilizar cuentas de correo personalizadas o informales, ya que restan credibilidad y nunca juegues con mayúsculas y minúsculas. Asimismo, en la redacción del mail nunca recurras a frases o saludos informales en el asunto.
En cuanto a la despedida, evita frases como “un cordial saludo”, “besos, “abrazos” y “sinceramente”. También, debes saber que la firma debe incluir el nombre completo, logo de la empresa en la que trabajas (si es el caso), teléfonos y redes sociales, para que así tu receptor pueda comunicarse contigo a través de otras vías o conocer más de ti.