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El iPhone se ha consolidado como uno de los productos clave, a través de los cuales se ha establecido el negocio de los smartphones.
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Apple ha sabido explotar el diseño como uno de los elementos que han marcado su dominio en el mercado tecnológico.
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El segmento de smartphones ha sido sumamente popular y es muestra del papel que juegan hoy en día las marcas tecnológicas.
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El mercado de smartphones ha priorizado el diseño y como parte de esta apuesta se ha convertido en un elemento de gran valor, el conocer las actividades que ayudan a que esta identidad visual y gráfica de productos y marcas los coloque como un referente en el mundo.
Para comprender esta trascendencia, las marcas han tenido que hacerse de una serie de actividades, entre estas actividades encontramos la nostalgia por el diseño que revalora diversos elementos como es el caso de productos sumamente populares, como lo puede ser el famoso iPhone 4, que marcó un distintivo único en el mercado de smartphones.
Nostalgia en diseño
La noticia de que Apple revivirá el clásico diseño del iPhone 4 en 2020 ha dado pie a una serie de especulaciones, como el hecho de que la compañía planea celebrar un aniversario con el cual dará un homenaje a este dispositivo en los 10 años que cumplirá de haberse lanzado al mercado.
Otras especulaciones advierten que se trata de una estrategia de diseño con la que Apple busca que el dispositivo vaya más en línea con los diseños curvos y simples de sus nuevas iPads.
Con esto en mente cabe la pena preguntarse qué tan válida es una estrategia de nostalgia en diseño.
El diseño se ha convertido hoy en día en el elemento diferenciador de una marca para lograr que esta sea exitosa comercialmente.
Existen toda clase de teorías que nos hablan de lo importante que es para una marca, el que esta logre integrar una buena identidad visual a través de una excelente estrategia de codificación gráfica, que logre comunicar los valores con los que cuenta ante el consumidor.
Ante estos elementos, es importante destacar el valor que encuentran las marcas sobre todo al buscar diferenciarse de la competencia y en el mercado tecnológico esto es clave, pues se trata de uno de los segmentos más competidos en el mundo, debido a que la actividad comercial se encuentra concentrada en muy pocas manos, lo que obliga a pensar en la identificación con el consumidor mediante elementos visuales y productos que terminan por convertire en un referente de gran peso en la industria.
En el segmento de smartphones el iPhone ha sido un gran ejemplo de cómo predecesores como el Blackberry o los teléfonos tipo folder como el lenzado por Motorola marcaron hitos en esta compleja materia de diseño.
A detalle.
Cifras del Deutsche Bank Research revelan que en México, el precio de un iPhone 6S fue de 821 dólares durante 2016. Para 2017 el precio de un iPhone 7 fue de 941 dólares. En 2018 el precio del iPhone 8 sumó los mil 51 dólares y para este 2019 el iPhone XS costaba mil 477 dólares.
La evolución de las ventas de Apple se han disparado desde los 270 mil iPhone en 2007 hasta los más de 78 millones de smartphones que se vendieron durante el primer trimestre de 2017, que ha sido el periodo en que mayor venta de estos smartphones se ha registrado en el mundo.
Con base en estimados de Kantar Millward Brown, Kantar Worldpanel y Bloomberg se estima que el valor de marca de Apple fue de 309 mil millones de dólares durante 2019.
Unas importantes proyecciones de IDC y Gartner advierten que los iPhone han pasado de dominar el 3.4 por ciento del total de ventas de nuevos smartphones durante el tercer trimestre de 2007 a vender el 10 por ciento del total de nuevos smartphones durante el primer trimestre de 2019.
Estimados de IHS Markit advierten que el componente más costoso de un iPhone es la pantalla, que tiene un precio de 120 dólares, seguida de los componentes mecánicos y electromecánicos, con un precio de 71 dólares.