Apple, tarde o temprano, buscará destronar a Tesla. Y no estamos hablando del precio de las acciones, sino de una estrategia agresiva de la marca de Cupertino en el segmento de negocio de los automóviles eléctricos y autoconducidos.
Según Akira Yoshino, Premio Nobel de Química en 2019 por sus investigaciones en el desarrollo de baterías de iones de litio, insumo clave para el despegue de los vehículos eléctricos, “hay que tener muy en cuenta a Apple”. Lo dijo en referencia a los actores del ecosistema de movilidad de los próximos años.
“¿Qué harán ellos [por Apple]? Creo que pronto van a anunciar algo. ¿Qué tipo de coche anunciarán? ¿Qué tipo de batería? Probablemente desarrollen algo en 2025. Si lo hacen, creo que deberían estar anunciando algo a finales de 2021. Esa es mi hipótesis personal”, le dijo a Yoshino a Reuters en una entrevista este martes 24 de agosto.
Las baterías de iones de litio, con Tesla en primer lugar, han posibilitado que por primera vez en la historia haya una competencia realmente seria para los vehículos propulsados por combustibles fósiles y los motores de combustión interna.
Miembro honorario de Asahi Kasei, la compañía química de Japón donde trabaja desde hace medio siglo, Yoshino ve más disrupciones en el futuro de los vehículos a medida que el transporte y la tecnología digital se conviertan en una sola industria, compartiendo la tecnología de baterías de litio.
Además de la posibilidad de que Apple lidere la convergencia de las industrias automotriz y la tecnología, Yoshino habló de la próxima generación de baterías para vehículos eléctricos y del potencial de los ecars autónomos compartidos que puedan cargarse las baterías solos.
Para el japonés, el hecho de que cómo los autos repongan la carga de batería es clave para que los vehículos autónomos sean una realidad masiva.
Según Yoshino, hay dos áreas principales de innovación que serían la clave en el desarrollo de los autos eléctricos. Por un lado, “más tecnología en las baterías”. En este sentido, habló de “materiales de cátodo y materiales de ánodo”.
Por otro, dijo que es vital el “cómo la gente usará los vehículos eléctricos y cómo los van a cargar”.
“La tecnología para la carga inalámbrica de baterías no es un problema, las complicaciones llegan en cómo aplicar esto en un sistema práctico. Hay dos posibilidades. Uno son los automóviles estacionados en lugares determinados donde haya carga inalámbrica disponible. Otra posibilidad es que el automóvil se cargue en movimiento, en las mismas carreteras. Podría ser posible”, dijo.
“No importa cuál sea la fuente de energía, se necesita reponer de alguna manera. Si el vehículo no puede hacer eso automáticamente, sin intervención humana, el sistema no tiene sentido”, agregó.
Y comparó: “Las aspiradoras automáticas recorren las habitaciones y se recargan solas. Si necesitaran que una persona venga y les ‘llene el tanque’, nadie querría comprar una”.
Al japonés dijo que la industria automotriz está pensando en cómo invertir en el futuro de la movilidad y, al mismo tiempo, las grandes tecnológicas también están pensando en lo mismo. “En algún lugar, en algún momento, habrá algún tipo de convergencia para el futuro de la movilidad”.