Apenas ayer hablábamos que Apple no superará el problema de las baterías de iPhone lo suficientemente rápido. Este martes este tema vuelve a dar un golpe duro a la tecnológica, debido a que ahora son las autoridades de Estados Unidos las que investigan si se violó alguna ley.
Es el Departamento de Justicia (DoJ) y la Comisión de Bolsa y Valores las que iniciaron una investigación formal y solicitaron la documentación necesaria a la compañía de Cupertino para determinar si violó leyes al afectar el rendimiento de los dispositivos mediante actualizaciones.
No obstante, la investigación que también analiza declaraciones públicas, se encuentra en etapas tempranas, según advirtieron fuentes cercanas al caso, citadas por Bloomberg.
Está claro que Apple no superará pronto esta situación que ya comienza a tomar tintes de crisis. Recordemos que todo esto se remonta a las últimas semanas de diciembre cuando se expuso en Reddit que la compañía reduce intencionalmente la velocidad de los iPhone 6, 6s y SE que son actualizados con el iOS 11.
El problema creció, hasta el grado de que se presentaron demandas colectivas y en países como Francia e Italia existen investigaciones sobre la presunta existencia de “prácticas comerciales incorrectas” que obligan a los consumidores “a comprar nuevas versiones” de sus dispositivos.
La firma dirigida por Tim Cook tardó en responder y, aunque emitió una disculpa pública y emprendió acciones para resarcir a los consumidores, su reputación no ha quedado del todo libre de mancha.
Ahora es en Estados Unidos donde las autoridades investigan si Apple violó leyes de consumo y protección al ciudadanos con sus actualizaciones de software. Esto en medio de la presión que vive por el presunto bajo nivel de ventas del iPhone X y en una semana en la que se espera de su informe de ganancias.
Esto sin duda podría afectar no las ventas del cierre del año pasado, sino las de 2018, pues según un análisis de la firma de inversión Barclays Capital, la tecnológica de Cupertino venderá 16 millones de iPhone menos durante este año, lo que equivale a 10 mil 300 millones de dólares en pérdidas de ingresos.