Estados Unidos.- Uno de lo efectos secundarios de la tecnología móvil es la entrega de control al usuario. Hoy los consumidores reciben tantas notificaciones que puede decidir a que le dan mayor prioridad. Si una llamada no resulta importante los usuarios pueden ignorar, contestar con un SMS o simplemente bloquear la solicitud de comunicación. Este fenómeno ha cambiado la relación entre consumidores y marcas, hoy las empresas deben buscar estrategias de marketing más sofisticadas y creativas con el fin de capturar la atención de sus clientes. Por otro lado las familias se han quedado rezagadas, son pocas las herramientas con las que se puede capturar un momento en comparación con el arsenal de marketing con el que cuenta Facebook, WhatsApp y Twitter mismos que se llevan la gran mayoría de los minutos de atención.

En especial los Baby Boomers han hecho un esfuerzo por adaptarse a la nueva tecnologías y las madres Millenials hoy utilizan más la mensajería instantánea que sus pares hace 5 años. Una de las características determinantes de las madres jóvenes es su apego casi obsesivo al teléfono móvil. Según una nueva encuesta realizada en los Estados Unidos por Meredith’s Parents Network titulada Millennial Moms & Media se encontró que casi la mitad de las madres de entre 19 y 36 dicen que los mensajes de texto y las redes sociales han sustituido a hablar con los amigos y casi un tercio dicen que envían mensajes de texto a su pareja más de lo que hablan. En este sentido se hace importante crear nuevas avenidas para controlar la comunicación con la familia. Ignore No More App es un esfuerzo por lograr ese objetivo. El app creada por Mountaineer Technology Ventures bloquea el teléfono hasta que los hijos se reporten de vuelta con su madre.

La pequeña aplicación móvil está disponible para dispositivos Android y presumiblemente llegará pronto al iPhone. Por sólo .99 dólares se puede adquirir en la tienda de apps de Amazon y controlar desde una cuenta maestra los aparatos telefónicos de los hijos. Según sus creadores no interfiere con servicios y llamadas de emergencia algo que sin duda tranquilizará los nervios de más de una Mamá tecnológica.