El Apollo 11 fue una de las hazañas espaciales con mayor trascendencia y este miércoles se cumplieron 47 años de que la misión descendió en la Luna.
Una de las primera oportunidades de marketing que se presentó fue la transmisión en vivo a través de TV, que de acuerdo a Broadcastiong Cable representó una inversión de 11 millones de dólares y mil personas dedicadas a la producción de esta transmisión por parte de los canales de TV que la llevaron a cabo.
ABC Internacional fue la señal que llegó a las televisoras en diversas partes del mundo y acumulando un total de transmisión via satélite de 225 horas, con lo que se superó, según cifras de The Communications Satellite Corp y recogidas por Broadcasting, el récord alcanzado por los Juegos Olímpicos de México 1968.
RCA y Westinghouse fueron las marcas encargadas de elaborar las cámaras con las que se llevó a cabo la transmisión con productos conocidos como la Lunar Camera.
Neil Armstrong, conocido por su popular frase de “es un pequeño paso para un hombre, pero un gran salto para la humanidad”, apareció en comerciales para marcas como Plymouth de Dodge-Chrysler.
El Omega Speedmaster fue seleccionado por la NASA, como el reloj oficial para las misiones oficiales y llamó la atención al ser el primer reloj en el espacio desde 1962 en que llegó a bordo de la misión Mercury con Wally Schirra hasta que logró el sobrenombre de Moonwatch al ser visto en Neil Armstrong.
Commander es el nombre de la campaña lanzada por Audi en febrero pasado y que logró más de tres millones 112 mil vistas en YouTube al utilizar en su historia la vida de un astronauta retirado y el significado de conducir un automóvil de la marca alemana, a manera de nostalgia.
Los momentos como el Apollo 11 han representado un escenario fértil para la mercadotecnia y la publicidad, áreas que han logrado en estos eventos, aplicar recursos con que sus marcas son asociadas de manera positiva a hechos históricos donde la nostalgia juega a favor.