Como parte de un amplio plan de reducción de gastos, Amazon está analizando muy de cerca el departamento de negocios relacionado con Alexa.
En el funcionamiento y desarrollo de Alexa trabajan unas 10 mil personas y es un sector de Amazon que habitualmente recibe capital externo vinculado a la inversión.
Según el Wall Street Journal, la unidad de dispositivos de la compañía fundada por Jeff Bezos, que tiene bajo su paraguas a Alexa, pierde unos 5.000 millones de dólares al año.
De acuerdo con la información recabada por el medio estadounidense, Amazon está considerando si debería enfocarse en tratar de sumar nuevas capacidades al asistente de voz Alexa, lo que requeriría una mayor inversión.
Siempre en función de lo publicado por WSJ, Amazon les ha comunicado a los empleados en otras divisiones no rentables que “busquen trabajo en otras secciones de la compañía” porque los equipos en los que están desempeñando sus labores serán suspendidos o cancelados.
Amazon le dijo al medio estadounidense que “se revisa regularmente la perspectiva de inversión y el desempeño financiero” de cada departamento y que están teniendo en cuenta “el entorno macroeconómico y considerando las oportunidades para optimizar los costos”. También dijo que son “tan optimistas sobre el futuro de Alexa como siempre”.
El impacto de la noticia de la revisión de costos por parte de la compañía fue inmediato en el precio de las acciones de Amazon: subieron más del 4,1 por ciento.
Amazon reduce costos
Más allá del aumento puntual, las acciones de Amazon no escapan a las de la mayoría de las empresas de tecnología.
Luego de la pandemia, la compañía de Seattle padece de complicaciones relacionadas con sus costos y una menor demanda.
Otras empresas, como Meta Platforms, matriz de Facebook, Instagram y Whatsapp, anunció esta semana un recorte de 11 mil trabajadores (13 por ciento del personal) por los problemas de ingresos que no alcanzan a los egresos.
Unos días antes, Twitter despidió a 3.700 empleados.
Alphabet, por ahora, no anunció despidos masivos, pero ha desacelerado el ritmo de contratación y redujo el apoyo a su incubadora de empresas emergentes.
Su presidente ejecutivo, Sundar Pichai, también se manifestó preocupado por la baja productividad de algunos empleados.
Las nuevas decisiones en Amazon contrastan con la fuerte expansión de la compañía en los meses de pandemia.
Entre finales de 2019 y finales de 2021, Amazon sumó más de 800 mil trabajadores nuevos, en especial en sus almacenes logísticos,
En ese tiempo, también firmó acuerdos por unos 10.000 millones de dólares en la compra de un fabricante de dispositivos robóticos, un estudio cinematográfico y una empresa de atención médica primaria.
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