Amazon es una de las empresas que se ha declarado a favor de la lucha a favor del medioambiente. De manera reciente anunció su entrada al negocio del reciclaje de baterías eléctricas como parte de su objetivo de lograr que para 2030 consiga que el 50% de sus envíos sean emisiones cero. Y para 2040 tiene el compromiso de impulsar alcanzar las cero emisiones netas de carbono, es decir, hacerlo diez años antes de lo pactado en el Acuerdo de París.

Sin embargo, de manera reciente salió a la luz que la empresa de ecommerce anunció su intención de expandir su flota de 70 aviones con la compra de 12 Boeing 767-300. Se trata de una flotilla de antiguos aviones de pasajeros que hoy funcionan como transportes de carga en todo el mundo. La meta de la compañía es tener pleno control sobre sus envíos y agilizar el proceso de entrega de mercancía en hasta un día.

El detalle es que estos aviones lanzan una cantidad considerable de emisiones contaminantes. “Si bien hay un sólido argumento económico para utilizar aviones más antiguos para el transporte de mercancías, puede que no sea un gran argumento para el medio ambiente”, señala al medio Bloomberg Andreas Schafer, profesor de energía y transporte en el Instituto de Energía de la UCL en Londres.

Hay un dato que es bastante revelador del peligro que representaría el hecho de que Amazon sume estos aviones a su flotilla de transporte aéreo de entrega. Según los datos de Cargo Facts Consulting consultados por Bloomberg, en la primera mitad de 2020, Amazon operó un 38% más de vuelos en Estados Unidos, en comparación con el mismo periodo de 2029. Según la empresa consultora, las emisiones de sus aviones aumentaron un 35% en 2019 al enviar 4.188 millones de kilos de carga en 40.163 vuelos.

¿Qué hay detrás de la decisión de Amazon?

Le porqué de la decisión de apostar por maquinaria antigua es muy clara: el ahorro que representa un 737-800 de 20 años convertido en avión de carga. Este transporte cuesta entre 21 y 23 millones de dólares, en comparación a los 100 millones de dólares que cuesta un nuevo Boeing 737-800, según los datos de la consultora IBA Group.

En días recientes, Amazon anunció la adquisición de un Boeing 767 propio. La nave tiene una capacidad de carga de 24 palés de 2,2 por 3,2 metros y 30 unidades de carga del estándar LD2. Pesa 86 toneladas y su peso máximo de despegue es de casi 187 toneladas. Este nuevo modelo se suma a la flota con la que ya cuenta la compañía. Pero entre la flota arrendada de Amazon también existe un modelo de avión más pequeño: el Boeing 737-800.   

Con Amazon Air, la compañía reduce su dependencia de operadores logísticos como UPS y FedEX, empresas que controlan el 60 por ciento del mercado de mercancías solo en los Estados Unidos. Con su propia flota de aviones, Amazon logra un mayor control de su cadena de suministro para hacer más efectivas las entregas a los clientes.

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