Las consecuencias de los miles de casos de los papeles de Panamá se conocerán a medida que salgan a luz los implicados y la legalidad de sus acciones, sin embargo ya comienzan a verse algunas, como la reciente renuncia del primer ministro islandés y en menor medida, la suspensión que ha hecho el conocido cineasta Pedro Almódovar de parte de las actividades promocionales de su nueva película “Julieta” para evitar la atención mediática.

Se trata del vigésimo largometraje del realizador que se ha convertido en noticia horas antes del estreno porque al difundirse los primeros datos sobre los llamados papeles de Panamá, aparece junto a su hermano y productor, Agustín Almodóvar, como apoderados de la sociedad Glen Valley Corporation, registrada en las Islas Vírgenes Británicas, desde junio de 1991 hasta noviembre de 1994.

Por ello, desde la productora de Almodóvar se ha dado a conocer a través de un comunicado que “Ante la prioridad informativa en temas ajenos a Julieta, hemos decidido desde El Deseo desconvocar el photocall y junket previstos para el día de mañana”, es decir, para este miércoles. Así mismo, se suspenden posibles entrevistas con el director, mientras se mantienen citas adquiridas pero con el equipo de actores al completo.

De esta forma, los documentos filtrados comienzan a generar reacciones por parte de quienes allí aparecen, especialmente de las personalidades publicas, como en el caso de los hermanos Almodóvar, quienes ya explicaron en un comunicado que estaban “al corriente” de sus obligaciones tributarias, aunque no han querido dar detalles sobre la empresa en un paraíso fiscal de la que aparecen como apoderados.