Lo infaltable siempre siempre son los tratados casi “filosóficos” intentando explicar acerca de la magia que envuelve a este deporte, algo que en términos golfísticos se conoce como “la mano del chango” una mano invisible que impide cumplir los sueños de cada noche anterior al juego. A este intangible Deepak Chopra en una de sus obras le otorgó la dimensión de: “Etéreo”.
En su libro “Iluminación” Deepak Chopra concluye: “puedo imaginar otras actividades que aporten más a los asuntos prácticos de la vida pero ninguna que refleje tan perfectamente nuestros sueños”.
El autor del texto nos encaminó a un refugio abierto construido de árboles, neblina y la grama sobre un campo de golf; lugar al que describió como “Jardín del Edén”. Un espacio onírico por el cual transcurre Adam el protagonista de la historia durante siete sesiones.
La narrativa se abisagra en una ronda en la que Adam enfrenta un tiro complejo resultado de un mal golpe, “un hook”, y justo allí entre la maleza con una bola enterrada en el fango y haciendo uno de esos berrinches silenciosos que acostumbran los golfistas. Un momento en el que las preguntas y los reclamos sobran, un momento de obscuridad que contrasta con el verde fulgurante del fairway. Sin más ni más un oportuno aguacero lo salva de dicho enfrentamiento con el destino dando por terminada la ronda. No sin antes descubrir una extraña voz que lo acompañará a lo largo de la historia.
El narrador utiliza la figura de una golfista profesional (Wendy) quien es la voz instructora de las sesiones, y mediante consejos específicos sobre de la técnica y recargando la instrucción sobre la parte inmaterial del deporte, logra durante cada sesión adentrar al protagonista en este universo; dejándonos ver a través de Adam la fisura virtual entre el entendimiento de una técnica y la concepción de una idea, esta amalgama nos anodiza mediante un relato que de poco en poco y mediante precisas analogías trata de iluminar el sendero entre la Tee de salida y la enjuta bandera en cada green.
Una de las citas que se utilizó en la narración trata sobre Billy Mayfair golfista profesional respondiendo a los reporteros al final de una excelente ronda: “Los hoyos se veían tan grandes como las tinas de baño, todo lo que hice fue quitarme de en medio”. Claro, qué otra respuesta podría dar después de una ronda en la que ejecutó 8 birdies consecutivos. ¿Qué significó “quitarse de en medio”? Este enunciamiento en principio pareciera un exceso de humildad por parte del profesional y ciertamente humorístico comparar un hoyo de 108 mm de diámetro con una tina de baño, debo decir que para el promedio de los mortales el hoyo se achica casi hasta la invisibilidad antes de cada intento por embocar.
La historia para nada cumple con el viaje tradicional del héroe en el común de las ficciones. El protagonista no logró mejorar su handi cap a un dígito, incluso no se mencionó sobre grandes tiros o hazañas en el campo. Es tal vez el entendimiento sobre de todo lo ajeno a la mecánica del swing lo que la hace inolvidable; una ficción que a diferencia de este ensayo podemos leer sin un conocimiento sobre del deporte.
Una invitación a descifrar la atmósfera y la intangibilidad en nuestras organizaciones, un exhorto a dejar la vista abajo en busca del “punto dulce o momento perfecto”. Una invitación a quitarnos de en medio y sensibilizarnos a cada hilo invisible sobre el que reposan nuestros procesos, esa madeja de intangibles que sin duda participan de un modo más activo de lo que a veces percibimos. Es pertinente agregar que a esta fecha la cantidad de birdies y pares por ronda poco han aumentado en el score de mis tarjetas, aunque los sueños antes de cada ronda siguen ahí a la espera de un mejor día todas las veces.
*Deepak Chopra. (2002). Iluminación. México D.F.: alamah.
*Consulta de vocabulario y términos comunes. https://www.golfsitges.com/vocabulario