Uno de los temas que más atención captan en el mundo de la tecnología de consumo, es la evolución hacia horadares inteligentes, donde casi todo lo del hogar pueda manipulase o solucionarse con la ayuda de la tecnología. Amazon lo sabe y quiere ser líder en este sector, pero un error de Alexa, su asistente virtual podría resultarle costoso.

Sucede que Alexa, el software que funciona con inteligencia artificial y que es una de las principales apuestas de la compañía de Seattle para conectar a las personas con sus servicios envió archivos de audio por error, y estos contenían fragmentos de una conversación privada de una pareja de Portland, Estados Unidos.

De acuerdo con diversos reportes de prensa, que citan como fuente al canal KIRO 7 News (afiliado a ABC), todo se debió a que, aparentemente, el asistente virtual se despertó al identificar una palabra que sonó muy similar a su nombre: Alexa. Posteriormente interpretó otra instrucción: “enviar mensaje” y, después identificó un nombre (que se mencionó en la conversación e interpretó como el destinatario.

Esta persona recibió los mensaje y alertó a la pareja que, de inmediato se alarmó al pensar que habían sido hackeados ya que poseen -según lora reportes- varios altavoces Amazon Echo Dot en su hogar.

Según Amazon -citada por la BBC y Gizmodo-, esto fue por que el asistente inteligente se activó al escuchar una palabra muy similar a su nombre y, acto seguido, el dispositivo preguntó cómo dar solución a las ‘órdenes’ que escuchaba’, sin embargo, los dueños no escucharon la activación de Alexa y, por tanto, no se percataron de su funcionamiento, incluso señalan que “no hubo advertencias”.

Aunque desde la gigante de señalan que la activación se debió a coincidencias, este es un error que podría costarle caro dada la creciente competencia que hay en el segmento de asistentes inteligentes; donde Google Home y Apple HomePod asechan para ganar share de mercado.

Además, podría reavivar uno de los temores que obstaculizaban su adopción por parte de los usuarios, precisamente por eso, los riegos a la privacidad, algo que podría jugar en contra de las ventas.