Cuando se habla de Steve Jobs, se colocan diversos temas en la mesa, desde liderazgo hasta innovación. Apple es el ejemplo más acertado de que se puede innovar un producto existente y formar una compañía que termine superando al resto en el segmento.
La historia es del surgimiento del iPhone es bastante entretenida, Scott Forstall, jefe de desarrollo de iOS y el iPhone, dijo en entrevista que el iPhone su origen en el intenso rechazo de Steve Jobs sentía por un ejecutivo de Microsoft, quien estaba harto de que alabara los lápices y pantalla táctil de la entonces nueva tableta de la empresa.
Entonces, decidió mejorar ese producto existente, dando marcha al “Project purple”, que si bien dio origen al iPad, el iPhone nació del mismo proyecto, luego de que se diera cuenta que la cuota de mercado del iPod peligraba por culpa de los teléfonos inteligentes, así que creó uno con pantalla táctil para anular a sus posibles competidores.
Fue en 2007 cuando lo logró y anunció al mundo el novedoso smartphone que no fue bien recibido en ese momento, pero que ahora es el líder en el segmento, es el producto estrella para la compañía con ingresos totales por 45 mil 408 millones de dólares, el periodo comprendido entre abril y junio, el tercer trimestre fiscal de este 2017.
¿Cómo lograr una hazaña similar? Es posible y el método integra tres claves sustanciales:
UNO. El mercadólogo debe investigar a fondo a su competencia, evaluar el rendimiento; aprender de su proceso de creación, distribución y ventas, tener en la mira de forma permanente al objetivo.
Así, descartar si la idea de innovar ese producto es posible o no, dependiendo de si se cuenta con las herramientas necesarias para hacerlo realidad.
DOS. El emprendedor con el firme objetivo de innovar, debe estar atento a las fallas de productos consolidados. Regularmente las grandes compañías se confían una vez que su poder de marca está a niveles como el de Apple o Samsung, compiten entre ellas, pero no atienden a pequeñas empresas que bien pueden estudiar sus fallas.
En el caso de Samsung es obvio que las baterías son algo que están tratando de corregir, mientras que a Apple se le exigen novedades en un modelo de iPhone del que los usuarios perciben como más de lo mismo. Ahí la oportunidad para el emprendedor en este caso, pero en otras industrias también existen y basta con detectarlos y hacer algo al respecto.
TRES. Mejorar un producto puede estar centrado en satisfacer varias necesidades a la vez, facilitar las cosas al consumidor o agregar características o funciones que el producto no tenga.
En la industria automotriz ocurre con VW, Daimler y Ford, que incluso fueron consideradas como las tres marcas con mayor innovación a partir de la información y sistemas de seguridad con que contaban, según cifras de Strategy & Center of Automotive Management.