Cuando una empresa inicia su proceso para lanzar una oferta pública inicial (IPO, por sus siglas en inglés) suele generarse mucha expectativa, especialmente si tiene una posición fuerte en el mercado, como en el caso de Airbnb.
En días recientes se ha especulado esto con la plataforma de reservaciones de hospedaje para viajeros, un movimiento que parecí buscar la mayor discreción, una que se rompió el miércoles.
Se hace oficio un movimiento esperado
Lo aterido debido a que Airbnb anunció que presentó ante la Securities and Exchange Commission (SEC) su registro formal para comenzar su oferta pública inicial en el mercado bursátil.
Si bien, se indica que el registro sigue siendo confidencial, se oficializó en proceso que finalmente permitirá a la plataforma cotizar para que los inversores particulares puedan comprar acciones y así generar capitalización.
“Hoy, Airbnb presentó de forma confidencial un borrador de Declaración de registro en el Formulario S-1 a la Comisión de Bolsa y Valores en relación con la oferta pública inicial propuesta de sus acciones ordinarias. La cantidad de acciones que se ofrecerán y el rango de precios de la oferta propuesta aún no se han determinado. Se espera que la oferta pública inicial tenga lugar después de que la SEC complete su proceso de revisión, sujeto a las condiciones del mercado y otras”, dijo la compañía de California en un comunicado citado por El Economista.
De acuerdo con la información disponible, se acota que Airbnb podría salir a la bolsa con un valor que estaría cercano a los 18 mil millones de dólares, según refirió recientemente The Wall Street Journal, aunque estimaciones de CB Insights y Statista la ubican con un valor de 31 mil millones, una de las 10 starups más valiosas del mundo.
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Un movimiento interesante
Sin duda, aunque no compite de manera directa con los hoteles pues el modelo de negocio y estrategias comerciales son distintas, realmente Airbnb es visto como un player a vencer en el sector turístico.
Uno que busca recuperarse de la crisis derivada por la emergencia de salud, pero a la que le ha costado debido a que las personas, aunque quieren salir, aún no se sienten seguras de viajar.
En ese sentido, todas las marcas del sector buscarán aprovechar cualquier oportunidad, en el caso de Airbnb, si todo resulta bien y no un desastre como cuando Snapchat salió a la bolsa, podría capitalizarse de manera importante permitiéndole enfrentar la situación financiera que vive actualmente y al mismo tiempo, reposicionar su marca y fortalecer su negocio.
Al respecto, el reporte Mobility Market Outlook en COVID-19, señala que los ingresos globales para la industria de viajes y turismo serán de aproximadamente 447.4 mil millones de dólares este año producto de los efectos de la pandemia de COVID-19, pues el pronóstico original era de alrededor de 712 mil millones.
