Después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pusiera en el ojo público el término “Fake News” al rechazar la información que es crítica hacia él, Rusia ha salido a manifestarse en el mismo sentido.
El gobierno de Rusia acusó a los principales medios de comunicación de Estados Unidos, como Bloomberg, The New York Times y NBC, de difundir “Fake News”, noticias falsas sobre su país.
El ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia apuntó esos medios, además de Santa Monica Observer, Daily Telegraph, entre otros, emiten “información falsa”, ya que “no corresponde con la realidad”.
De acuerdo con las autoridades rusas, la información que circula en occidente sobre el presunto hackeo de Moscú a las elecciones de Estados Unidos, o los submarinos rusos que operan en el norte de Europa, son “Fake News”.
Las noticias falsas se han convertido en tendencia global, a raíz de que las historias engañosas que se nombran como “reales” inundan la red y tengan el objetivo de influir en los votantes, como sucedió en Estados Unidos y como puede suceder en Francia.
Las demás historias calificadas como “falsas” por Moscú van desde el informe del Nuew York Times sobre el despliegue secreto por parte de Rusia de un nuevo misil, la violación del tratado de control de armas, o la supuesta información de que funcionarios de Rusia intentaban derrocar al gobierno de Montenegro.
Por su parte, Bloomberg y New York Times aseveraron que “estaban del lado correcto de la historia de sus reporteros”, y también Rusia, quien negó su influencia sobre gobiernos extranjeros, como Estados Unidos.