La alemana BMW tendrá que llamar a revisión 41 mil 685 automóviles en China, a causa de problemas en el sistema de airbags, indicaron este martes las autoridades de regulación chinas.
El problema radica en que al activarse los airbags de conductor y pasajero de estos autos, los generadores de gas de su interior pueden sufrir daños y proyectar fragmentos hacia los ocupantes del vehículo, según informó la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena, referida por la agencia china Xinhua.
De acuerdo con el reporte, BMW se comprometió a reemplazar las piezas defectuosas sin representar algún costo al consumidor.
La automotriz alemana tiene previsto iniciar la revisión a partir del 9 de octubre de 2017. Se detalla que los modelos afectados pertenecen a una serie de 3 mil 926 vehículos fabricados entre el 2 de enero y el 26 de diciembre de 2012, y a otra de 37 mil 759 autos de modelos diferentes fabricados en 2012.
Ya hemos hablado en otras ocasiones que algunos de los principales factores que los consumidores volaran de las automotrices -además del precio, claro-, es la eficiencia y confiabilidad de los vehículos, estos influyen en la buena o mala imagen, activos que suman directamente a la reputación de marca.
El año pasado fue un año complicado para el sector, diversas compañías pasaron por momentos complicados debido a fallas de fábrica identificadas en varios modelos, aunque la mayoría fueron atendidos de manera oportuna.
El 2017 no inicia diferente, ya conocimos el caso de Volkswagen AG que llamó 576 mil vehículos a revisión en Estados Unidos, debido a problemas en la bomba eléctrica de enfriamiento y en los techos de algunos modelos A5, A5 Cabriolet. Caso similar a lo que sucedió con Ford en Sudáfrica.
El problema de las airbags no es nuevo para BMW, algo que debe ser considerado ya como una alerta para la marca y analizar sus procesos de fabricación y proveedores. Esto debido que hace un año tuvo que regresar 840 mil vehículos en Estados Unidos, debido a defectos en el sistema de bolsas de aire fabricadas por Takata, la misma marca que causó problemas por la misma razón en millones de automóviles fabricados por Toyota.