¿Sabría el periodista Rafael Alducín el impacto comercial que ocurriría 94 años después, cuando en 1922 hizo una invitación a la gente para seleccionar un día para celebrar a la madre?

No lo creo. Y tampoco sabría que el papel de la madre para la elección de su regalo se iba a modificar completamente.
Ya la imagen de la “madrecita abnegada” con su “ojito Remy” por haber recibido una lavadora o una licuadora en este día está quedando en desuso.

Aunque todavía existen muchas tiendas departamentales, muebleras, de artículos del hogar y marcas de electrodomésticos que insisten en ofrecer sus productos de esa categoría para celebrar a las mamacitas. Celebrándolas dándoles más trabajo o más instrumentos para llevarlo a cabo de una manera “más cómoda”. A fin de cuentas, sigue siendo trabajo.

Aunque las ventas de los electrodomésticos cayeron un 5% el año pasado, todavía se espera que este año incremente un 15% respecto al promedio de otros meses en el año. La fe no se pierde para la venta de estos artículos y parece ya una tradición buscarlos en las tiendas para regalárselos a las madres mexicanas con un moñote.

Pero ya hay cifras que nos están diciendo que el comportamiento de consumo está cambiando. Por ejemplo, como lo menciona elfinanciero.com.mx en su sección de economía: las planchas, las máquinas de coser y las licuadoras dejan de ser los regalos más recurrentes del Día de las Madres y ceden su lugar a productos más enfocados a mujeres ejecutivas o que trabajan.

¿Los más demandados? Los celulares, la ropa y los accesorios femeninos.

De acuerdo a Miguel Cotero, Presidente de la Cámara de Joyería de Jalisco, se prevé un aumento de 20% en las ventas de este año y uno de los productos para los que se espera mayor demanda son los de joyería religiosa, en especial las medallas con la figura de San juan Pablo II, debido a su reciente canonización.

Parece ser entonces que, afortunadamente, las mamás ya están buscando ser más apapachadas con artículos que si estén más apegados a sus gustos o necesidades.

Son, por lo menos las que tienen la posibilidad, mamás más modernas y que tienen la fortuna de que les den un regalito que va más allá de su sobrevivencia.

Y aquí ya no quiero entrar a un tema que me pone los pelos de punta, al plantearse quitar apoyo a madres en situación de pobreza extrema que tengan más de 3 hijos, en lugar de buscar la manera de educarlas en términos de planificación familiar, así que mejor sigo con el tema anterior…

En fin, de cualquier manera, espero que este Día de la Madre que viene, tengan o no a quien festejar, regalen un refrigerador, unos chocolates o unos aretes del tianguis, recuerden que tienen alguien en quien pensar.

Va uno de los videos que me han gustado más referentes al papel de las madres.