A medida que la competencia entre las aerolíneas se acrecienta, las compañías buscan optimizar la rentabilidad de todas las maneras posibles. Una de ellas es quitando beneficios, como alimentos en todas las clases de viajeros, maletas gratis, la posibilidad de llevar kilogramos extra, etcétera.
Estas limitaciones se acrecentaron con la pandemia. Basta decir que la mayoría de las ganancias que las aerolíneas lograron en 2019 (que fueron extraordinarias, por cierto), se dilapidaron en los primeros meses de 2020, cuando la gente solicitó reembolsos por la contingencia.
Lo decía una investigación de Brand Finance, que también advertía que el sector de los viajes y las aerolíneas iba a ser el más perjudicado por el covid-19.
Sin embargo, por más problemas que pueda traer el costo de las maletas, no es bueno reaccionar, porque puede traer complicaciones aún más graves.
Este fin de semana, en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood de los Estados Unidos, un hombre de 74 años fue arrestado y ahora enfrenta la posibilidad de pasar el resto de su vida en prisión.
Según reporta el South Florida Sun Sentinel, en base a los datos aportados por la policía local, Wegal Rosen se alteró por el costo de la tarifa de equipaje de una aerolínea, tiró la maleta en salón de embarque del aeropuerto y dijo que había una bomba en su equipaje de mano.
Al parecer, Rosen “hervía de rabia” (así relata el periódico) cuando estaba frente al mostrador de facturación de Air Canada y el empleado de la aerolínea le dijo que tendría que pagar por una de las maletas antes de abordar su vuelo a Toronto.
Fue en ese momento en que el pasajero, furioso, dejó la maleta y alertó sobre una bomba en su interior a modo de protesta.
Lo que siguió fue un descontrol total. Es que el resto de los viajantes no había visto lo que había detonado la protesta, por lo que comenzó a correr frenéticamente y las fuerzas locales desalojaron el lugar.
En total, tres terminales del aeropuerto fueron evacuadas, se cerraron las calles aledañas, ocho vuelos fueron cancelados y más de 30 se retrasaron.
A los pocos minutos, la Policía se dio cuenta de que Rosen estaba mintiendo, pero el operativo ya estaba lanzado y no se podía detener por los protocolos en caso de ataques terroristas.
“Los investigadores lo arrestaron y lo acusaron de informar falsamente sobre una amenaza de bomba. Ahora enfrenta hasta 15 años de prisión”, publicó el Washington Post.
La fianza de Rosen se fijó en 20 mil dólares, aunque por ahora no está claro si fue puesto o no en libertad.
Las amenazas de bombas falsas en aviones y aeropuertos ocurren con frecuencia en Estados Unidos.
En junio pasado, el FBI arrestó a un hombre del estado de Georgia por afirmar que había una bomba en un avión en el Aeropuerto Internacional de Lehigh Valley en Allentown, Pensilvania. El caso está siendo investigado.
En marzo, las fuerzas del orden de Florida evacuaron el Aeropuerto Internacional de Daytona Beach después de recibir una amenaza de bomba.
La policía inspeccionó el bolso de Rosen y no encontró pruebas de una bomba, según el comunicado de prensa oficial. Sólo se halló un aparato que es utilizado por personas que tienen apnea del sueño.