Para las marcas ahora no basta con entregar productos y servicios a un precio accesible para conquistar al consumidor. Estas relaciones hoy por hoy consideran otro tipo de situaciones, en donde uno de los puntos más importantes ha sido la manera en la que las empresas tratan a sus empleados. Este asunto, ahora ha puesto a una aerolínea en el ojo del huracán.
El asunto ha involucrado a la aerolínea Best Way misma que ahora se ha convertido en el foco de críticas en redes sociales, luego de que una mujer, que supuestamente habría sido contratada como azafata, fue presuntamente despedida luego de que el uniforme que le fue entregado no le quedara.
Los hechos
En días pasados, la usuaria de Instagram identificada como Alba Nevado, denunció desde su cuenta oficial de Twitter que, tras conseguir un puesto como azafata en la mencionada aerolínea, fue despedida porque el uniforme que le fue entregado “no le quedó” a pesar de que en diversas ocasiones ella habría indicado su talla.
Los hechos fueron denunciados por Nevado en una serie de videos, en donde aseguró que lo hechos por Best Way habría sido un acto discriminatorio contra su físico una vez que la aerolínea decidió terminar su su contrato como azafata de la Feria Internacional de Turismo (FITUR) en Madrid por motivos relacionados a su talla y peso.
A decir de lo dicho por la afectada, luego de haber superado todas las pruebas para obtener el puesto y tras haber sido capacitará para comenzar a laboral, recibió su uniforme pero en una talla única, situación que le impidió utilizarlo.
Este incidente fue comunicado a la empresa, desde donde le indicaron que se presentara con un traje negreo para verificar nuevamente la talla de su uniforme y entregarle uno a su medida.
Lo cierto es que una vez que llegó a las instalaciones de la aerolínea, los representantes de la marca le cuestionaron si ella “era la del problema” para posteriormente entregarle un pantalón de hombre que “como era más grande, quizá podía quedarle bien”.
La mujer fue apartada del resto de los compañeros, para recibir una disculpa y fue entonces cuando le indicaron que “no podían tenerla allí trabajando sin uniforme”, siendo que el único problema real era conseguir la talla adecuada en la falda.
“Me dicen que lo sienten mucho, pero que me mandan a mi casa porque no puedo trabajar sin uniforme. Como si el problema fuera mío. Yo no quiero que me traten como si fuera un problema y como si mi imagen fuera lo único que sirviera para trabajar, en un puesto que sé que soy lo suficientemente válida como para estar, pero como no encajo dentro del canon de belleza que a día de hoy conocemos, pues no tienen una talla para mí. Por lo tanto, no puedo trabajar”, explicó la mujer afectada desde sus redes sociales.
La respuesta de la marca
Tras esta denuncia, cientos de usuarios comenzaron a expresar su apoyo a Alba, situación que se tradujo en una serie de criticas hacia la aerolínea involucrada, la cual no tuvo más que responder a los hechos, en principio, con una llamada directa a la afectada donde se le ofreció otra vacante en la que “no tuviera que estar tan expuesta ni visible por cuestiones con el uniforme”.
La propuesta fue rechazada por la afectada quien expresó “he recibido sentidas disculpas por el momento tan desagradable… Me han ofrecido incorporarme con un uniforme distinto que pudiera valerme a un puesto de trabajo en el que no llamase tanto la atención el hecho de no estar igual de uniformada, esto debido al protocolo de uniformidad que en la mayoría de empresas hay y yo he sido partícipe. A esto yo he dicho NO, ahora mismo no estoy en condiciones físicas, psicológicas o mentales como para atender al público de una manera agradable y simpática”.
Según el testimonio de la usuaria de Instagram, “el hecho de que no hubiera uniforme de mi talla, se ha relacionado con la escasez de fabricación y presupuesto en cuanto al uniforme. Todo esto derivado por la crisis de la pandemia”, al tiempo que indicó que le fue solicitado borrar el primer video con la denuncia, a lo cual se negó.
Luego de esto s hechos, Best Way emitió un comunicado mediante el diario español ABC aclarando que Nevado “no se probó el uniforme que le entregaron en las instalaciones como el resto de sus compañeros”, al tiempo que indicaron “ningún miembro de nuestro personal fue rechazado en nuestra empresa ni por su talla ni por su peso. Contamos con personal de soporte para el sector de los eventos con todo tipo de tallas: inferiores, iguales y superiores a la de Alba”.
Reputación en juego
El asunto deja en claro lo importante que es ahora para las marcas cuidar cada uno de los puntos de contacto que se tiene no solo con el consumidor sino con sus empleados, mismos que sin duda son parte fundamental del éxito para cualquier firma.
Y es que los empleados son los primeros y mejores embajadores de marca. Su palabra puede hundir y hacer crecer a cualquier marca frente al consumidor.
DE esta manera no resulta extraño que, tal y como indica un estudio firmado por The Hinge Research Institute, el 79 por ciento de las empresas que destina esfuerzos para convertir a sus empleados en los principales constructores y embajadores aseguran que la visibilidad de sus marcas aumenta de manera considerable, situación que se repite en el 65 por ciento de los casos cuando se toman en cuenta el incremento del tráfico web, el recuerdo de marca y el engagement hacia la misma.