Por Alfredo Cervera
La mercadotecnia debe centrar su inversión en conocer los hábitos y estilo de vida de los consumidores, en lugar de sólo enfocarse en sus ingresos.
Hace algunos años, Coca-Cola Company descubrió que 90 por ciento del consumo de Diet Coke provenía del 9 por ciento del target. A pesar de tener como trasfondo una gran cantidad de estudios, los esfuerzos en publicidad llegaban a las personas equivocadas. Este es un ejemplo de cómo es necesario refinar los métodos de segmentación para detectar a los verdaderos compradores potenciales.
Las nuevas tendencias en comunicación, que buscan que una marca sea parte de la vida de los individuos, requieren información sobre hábitos de consumo, intereses personales y postura frente a los medios. De ese modo, varias agencias de investigación refinan sus estudios psicográficos y antropológicos, con el objetivo de dar cuenta de los diversos nichos que tienen mayor representación en nuestro país.
Hasta el momento, se identifican seis grupos que marcarán la pauta de cómo una compañía se vincula con su target: kids, teens, DINKs, greys, familias y gays. A partir de ellos, surgirán las tendencias en compra publicidad. La segmentación socioeconómica, útil en su momento, pasa a un plano secundario.