Con frecuencia, los adolescentes son acosados por su peso en las redes sociales, y el acoso aumenta con cada hora que pasan en esos sitios, revela un estudio recientemente por la revista PLOS One. Casi uno de cada cinco adolescentes (un 17 por ciento) dijo que había experimentado acoso en línea relacionado con el peso. Además, cada hora adicional de uso de las redes sociales trajo consigo un aumento del 13 por ciento en el acoso relacionado con el peso, calcularon los investigadores.

“Esta experiencia puede tener efectos adversos, como una mala imagen corporal, conductas alimentarias desordenadas y síntomas de ansiedad y depresión”, señaló el equipo de investigación dirigido por David Hammond. Es profesor de la Facultad de Ciencias de la Salud Pública de la Universidad de Waterloo en Ontario, Canadá.

Los investigadores analizaron los datos de encuestas de más de 12,000 adolescentes en Australia, Canadá, Chile, México, Reino Unido y Estados Unidos. En general, los adolescentes pasaron un promedio de 7.5 horas frente a la pantalla recreativa todos los días de la semana.

¿En cuáles redes se da el acoso?

Twitter, ahora conocido como X, era el sitio más tóxico, con un 69% más de probabilidades de ser acosados por su peso.

Sin embargo, Twitter también fue la plataforma de redes sociales menos utilizada entre los adolescentes, ya que solo el 22% dijo que la usaba.

Pero los sitios de redes sociales más populares también tenían un mayor riesgo de acoso por sobrepeso, encontraron los investigadores:

Instagram, utilizado por el 55% de los adolescentes, tenía un 35% más de riesgo de acoso por peso

Facebook, utilizado por el 50% de los adolescentes, tenía un riesgo un 39% mayor

TikTok, utilizado por el 49% de los adolescentes, tenía un riesgo un 26% mayor

Snapchat, utilizado por el 38% de los adolescentes, tenía un riesgo un 25% mayor

¿Qué hacer para atenuar el impacto de los mensajes de acoso?

Los adolescentes con obesidad se enfrentan a muchos otros retos fuera de la presión para adelgazar. Pueden ser objetos de burlas en la escuela, muchas veces despiadadas, debido a su peso corporal. Con el paso del tiempo, esta situación puede tener una gran carga emocional que los hace sentir aislado, avergonzados y tristes. A algunos de estos niños finalmente les da terror ira a la escuela, y tienden a dejar de asistir a las clases. De acuerdo con la investigación, los jóvenes que son víctimas de burlas debido a su peso corporal también tienden a dejar de participar en actividades físicas en la escuela, tales como las clases de gimnasia o los deportes, con frecuencia debido a que en estos ámbitos se sienten vulnerables a ser objeto de burlas.

La American Academy of Pediatrics (AAP) y la Asociación contra la Obesidad (The Obesity Society) elaboraron una guía para los pediatras y los profesionales de la salud sobre las consecuencias negativas de las burlas y el acoso a causa del peso corporal. También recomendaciones para evitar consecuencias de estos abusos:

• Enfatice ante sus interlocutores que nadie merecer ser objeto de burlas. Ya sea por su peso, color de la piel o cualquier otra razón. El acoso no es aceptable.
• Los jóvenes afectados no deben reaccionar antes la provocación. Si el acosador se da cuenta de que le produce ansiedad o que comienza a llorar, las burlas serán peores. Anime a quien es víctima de acoso a mantener compostura, darse la vuelta, y alejarse de la situación.
• Comuníquele al profesor de la víctima sobre el acoso. El profesor puede interceder y ponerle fin a esta situación. Si las burlas continúan, pídale al director/rector de la escuela o al consejero escolar que intercedan. Su hijo puede sentirse avergonzado y no querer hablar con ellos, pero usted no puede permitir que lo sigan maltratando. Muchas escuelas tienen ahora políticas contra el acoso escolar, pero a veces las burlas debido al peso corporal no se toman en cuenta. Generalmente es mejor comunicarle al profesor y al director/rector de la escuela para que intercedan, en lugar de que usted mismo contacte al abusador o a sus padres.
• Convenza a su hijo para que estreche sus lazos con los amigos que tiene en la escuela. Si pasa tiempo con un grupo en el patio de recreo o en el comedor, es menos probable que lo señalen y sea objeto de malos tratos.
• Vigile la actividad de sus hijos en las redes sociales (computadoras y teléfonos móviles) y tome muy en serio el acoso cibernético del que pueden ser objeto sus hijos. El acoso a causa del peso corporal es frecuente en las redes sociales y puede ser devastador. 
• Identifique actividades fuera de la escuela en las que sus hijos puedan participar, donde frecuenten a nuevos grupos de amigos menos propensos a las burlas.
• Pase tiempo con su hijo y trátelo como una persona importante. Ayude a fomentar su autoestima, demostrándole respeto y aceptación y diciéndole con frecuencia: “creo en ti”. 
• Reafirme los puntos más fuertes y las cualidades admirables de su hijo que no tienen nada que ver con el peso corporal.