Internacional. Es bien sabido que uno de los ‘mantras’ más comunes en el marketing es que todo se vale. Bajo esta lógica, ocupar temas de alto impacto o políticamente incorrectos para anunciar productos o servicios es aceptable, siempre y cuando se cumpla con el mensaje final o el objetivo primordial de la marca.
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Sin embargo, no dejan de aparecer en el mundo esfuerzos de comunicación que generan polémicos debates -de corte moral o profesional- sobre lo bien o mal empleados que están los temas para una campaña. Un ejemplo de ello es la simpática publicidad de Korcrossfit -un gimnasio brasileño especializado en crossfit-, en donde decidieron emplear el terrorismo y la pedofilia como una forma de promover esta técnica de entrenamiento de seguimiento.
De esta forma, una monja que persigue a un padre, que persigue a un joven que persigue -a su vez- una revista Play Boy, fue la forma en la que este gimnasio quiso dar a entender la importancia de mantenerse en movimiento. Un caso similar con la ilustración en la que aparece una imagen alusiva al presidente Obama persiguiendo un barril de petróleo.
A continuación los trabajos:
Créditos
Agencia: Jabuticaba, Brasilia, Brasil
Director Creativo: André Sartorelli
Director de Arte: André Sartorelli, Luciano Crisp
Copywriter: Thiago Rezende
Ilustración: Santiago / Estúdio Ilustrativa
Con información de: Ads of the World, Design Taxi