Los adultos se muestra más propensos a que no les agrade tanto la publicidad (61 por ciento) vs. a los que si les agrada (34 por ciento) según este reciente estudio de YouGov, en el que además se muestra la existencia de un grupo al que intensamente le desagradan los anuncios comerciales (28 por ciento).
Según la investigación, cuyos resultados ha sido divididos por grupo, estos son los datos destacables:
Por género, las mujeres muestran 12,5 por ciento más de propensión a que les guste la publicidad que a los hombres, mientras que por edad, los grupos de más años tienen una visión más suavizada que los jóvenes. En el grupo de 30 a 44 se tiene la visión más positiva (les gusta en alguna medida) hacia la publicidad (42 por ciento vs. el promedio del estudio que es 34 por ciento). Aunque en el grupo de los adultos de más de 65 años, un 37 por ciento señala que les desagrada mucho el ‘advertising’.
Por raza u origen étnico, en este estudio sobre adultos estadounidenses, un 63 por ciento de los afroamericanos gusta de la publicidad desde “un poco” a “mucho”, lo que les coloca en primer lugar en este sentido, sobre el resto.
Los hispanos, por su parte, también están por encima del promedio, reportando en un 51 por ciento que gustan de los anuncios comerciales, mientras que el caso de la población blanca, apenas un 26 por ciento tiene esa preferencia.
Por ingresos, quienes ganan más de 50 mil dólares anualmente se muestra más abiertos a que les agrade la publicidad, que quienes no alcanzan tal cifra.
Y si se trata de identificación política, los demócratas, muestran con un 45 por ciento, que son los que más gustan de la publicidad, antes que los republicanos, (31 por ciento) y los independientes (28 por ciento).
Mientras que la medición de YouGov estaba relacionada con la publicidad en general, vale la pena recordar que el gusto por los anuncios no siempre está relacionado con su efectividad. Un estudio de Ace Metrix publicado en 2014 mostraba que los anuncios divertidos/graciosos gustaban mucho a las audiencias, pero no se correlacionaban de forma justa con la intención de compra y otra investigación más reciente de Advertising Benchmark Index (ABX) encontró que el gusto por los anuncios no estaba relacionado de forma eficiente con la relación hacia la marca o el mensaje que se envía.