Santiago, Chile.- Para los extranjeros, nuestra capital suele ser un lugar amable, no así para quienes vivimos en ella- bueno, el pasto del vecino siempre es más verde-, por lo que los avances en materia de calidad de vida siempre se agradecen y las bicicletas son claramente bienvenidas. Ahora le tocó la suerte a la comuna de Vitacura, que tendrá el sistema más avanzado de bicicletas públicas de Latinoamérica.

Si bien la comuna de Vitacura ha sido considerada por varias encuestas como el mejor lugar para vivir en Santiago – también un de los más caros- tiene un par de falencias: la velocidad a la que circulan los automovilistas suele ser a ratos suicida, en especial los fines de semana y, por otra parte, teniendo muchas plazas, parques y áreas verdes, faltaba un poco más de motivación para que sus habitantes usaran bicicletas. Es decir, muchos las utilizan el fin de semana en la ciclo vía de la Av. Monseñor Escrivá de Balaguer, donde se reúne la familia, pero no existía un punto específico, como se da en otras comunas como Proviencia, en el que la gente pudiese tomar una bicicleta pública. Eso acaba de cambiar.

A raíz de una iniciativa del Banco Itaú, junto B-cycle LLC, el Ministerio del Medio Ambiente logró presentar un avanzado sistema- el primero en Latinoamérica- automatizado de bicicletas públicas. Se trata del proyecto BikeSantiago, que comenzará en esta comuna y en marzo llegará a Lo Barnechea, para alcanzar al menos 1000 bicicletas para el año que viene, en miras a una cifra final de al menos 3.000 bicicletas, junto a 300 estaciones en varias comunas . La idea es incentivar el uso de la bicicleta como medio de transporte diario, tal y como se hace en otros lugares del mundo.

¿Cómo opera?

El sitio BikeSantiago estará abierto para que los usuarios puedan registrarse y acceder a la tarjeta que operará con el sistema, que contempla operación por medio de paneles solares. Las bicicletas dispondrán de GPS y aviso de mantención por medio de un software especializado. Además, el sistema permitirá al usuario, a través de cualquier dispositivo computacional,  conocer el nivel de disponibilidad de las bicicletas, tiempo de uso y otros.

El costo será mínimo – menos de 10 dólares mensuales- y el socio-usuario tendrá derecho a utilizar todas las bicicletas que quiera durante la jornada, con la única restricción de no superar los 30 minutos por tramo.

El servicio estará disponible desde las 6:30 de la mañana hasta las 22:30 horas en invierno y hasta las 23:00 horas en verano.