Sin duda uno de los temas de mayor actualidad es el cambio climático, sin embargo gracias a los medios de comunicación se ha convertido en un fenómeno mundial, quirúrgicamente posicionado a través de técnicas de marketing y con valores agregados que han sido capaces de crear una industria: la comunicación del cambio climático.
De acuerdo con el programa de investigación del cambio global de los EE.UU., el cambio climático se refiere a un calentamiento que está sucediendo en el mundo, al aumento del nivel de los mares y algunos fenómenos meteorológicos se están volviendo más frecuentes y severos. Estos cambios han impactado a todas las regiones. Sin embargo, la comunidad científica aún está dividida respecto a la certeza de este cambio y hay críticas respecto a la validez científica de la información.
Una pregunta obvia es ¿y que tiene que ver el marketing con el cambio climático? En el lado positivo, ha creado espacios para el posicionamiento de la información que permita un cambio de los hábitos de consumo que dañan el medio ambiente. Pero, en el lado negativo, muchos de los productos dañinos son vendidos a través de campañas diseñadas con los últimos avances de la mercadotecnia para minimizar este efecto.
Los estudios más recientes en EE.UU, muestran que más del 75% de su población acepta que el cambio climático es responsable del clima extremo que han sufrido en los últimos años. Sin embargo, si la realidad fuese así, entonces nos referimos a un fenómeno global, que se origina y afecta a todos los rincones del mundo. El mapa de la figura muestra el cambio de temperatura en los últimos años.
De acuerdo con el estudio desarrollado en 1993 por el Pew Research Center , para el público norteamericano las amenazas globales más importantes son (en orden descendente), el programa nuclear de Corea del Norte, los grupos islámicos extremistas, el programa nuclear iraní, la inestabilidad financiera y el cambio climático. Mientras que en los países de América Latina, estas amenazas cambian de forma interesante, en primer lugar encontramos el cambio climático, seguido por la inestabilidad financiera, el programa nuclear iraní y el programa nuclear de Corea del Norte.
Uno de los avances más notables de la mercadotécnia en los últimos años es el posicionamiento de productos ecológicos, tecnologías verdes y campañas de concientización del reciclado, reducción y re-uso. Sin embargo, hoy se sabe que los esfuerzos a nivel individual no impactarán tanto como los cambios de políticas públicas y de actitudes empresariales. El estudio publicado en 2012 (http://www.csrwire.com/press_releases/34979-Majority-Of-World-s-Largest-Companies-Shifting-To-Clean-Energy) por Calvert Investments, Ceres y World Wildlife Fund (WWF) muestra que la mayoría de las empresas no están esperando a que los gobiernos adopten energías renovables y reducción de emisiones.
Seth Godin, notable mercadólogo, hace notar dos aspectos importantes, el primero que el reto del cambio climático es contar una historia que pueda crecer desde el consumidor y no ordenado por la autoridad. Hace énfasis en educar a la tribu para lograr pasos concretos. Así propone que el marketing eduque. El otro punto que hace notar es que el marketing del cambio climático está mal planteado pues las palabras global y calentamiento tienen una connotación positiva y nos sentimos bien con ellas. Por eso el propone referirnos a este cambio como un cáncer atmosférico, que conlleva un sentido de urgencia y deterioro.
En los años ochenta en México, surgió una serie de historietas cuyo título genérico es “Sensacional de …” De esta forma, se publicaron títulos como “Sensacional de Traileros”, “Sensacional de Barrios “ o “Sensacional de Luchas”. Así, con tantos mensajes en la escena del cambio climático, bien podría existir un “Sensacional del Cambio Climático”.
¡ Recicla, reduce, re-usa y no te desconectes !
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